Los primeros fuertes rayos solares después de meses de invierno atraen a muchas personas hacia fuera, y mientras toman el sol, la luz provoca que sus cuerpos provoquen hormonas para sentirse bien y vitamina D para estimular su sistema nervioso.
Sin embargo, los rayos solares son peligrosos, demostrado por las quemaduras del sol. Los rayos ultravioleta destruyen o alteran el núcleo de la célula. La piel sólo puede compensar por parte del daño antes de volverse rojo, incluso cuando cuenta con su propio nivel de protección.
Dicho nivel de protección varía dependiendo del tipo de piel y la intensidad del sol. Se suele tardar 20 minutos para las pieles con muy poco o sin ningún bronceado. Por lo tanto, la piel requiere una protección adicional. Una buena forma para proteger la piel de los rayos ultravioletas que pueden causar una quemadura es evitar el intenso sol, manifestó Swen Malte John, profesor de dermatología de la Universidad Osnabrck.
En pleno verano, el sol más intenso ocurre al mediodía. No obstante, el sol también puede ser fuerte en otros periodos de tiempo del día y dañar gravemente a la piel.
Es casi imposible proteger el cuerpo completamente del sol, especialmente durante unas vacaciones de verano.
“La ropa debería de cubrir mucha piel,” comentó Heidrun Holstein, una médica especialista de un centro de consumidor alemán en Karlsruhe. Ella recomienda sombreros de alas anchas y camisas de manga larga fabricadas con material liviano y material resistente a rayos ultravioleta que sólo permiten un poquito de sol.
Aquellas partes de la piel que no están cubiertas por la ropa, como la cara y las manos, deberían de estar protegidas por crema solar. El criterio más importante al elegir crema solar es el tipo de piel. Aquellas personas con una tez más oscura tienen una protección más alta en su piel, y por eso pueden elegir un factor de protección más baja, mencionó Holstein.
Generalmente, el factor de protección solar (FPS) debería ser de 15 o superior. Cuando se va a la playa o a un lugar de nieve, donde la luz del sol es reflejada, se recomienda usar un FPS más alto. También ayuda comprobar el índice de UV, el cual consiste de un valor numérico sobre los rayos ultravioleta prevista que causan quemaduras. En algunos países, es posible encontrar el índice de ultravioleta previsto en el Internet, y algunas veces, el índice es mostrado como parte de un informe meteorológico.
La descripción de la crema solar debería de contener unas palabras claves y debería de indicar que el producto no sólo protege contra rayos UV-B, sino también UV-A. También debería de proporcionar alguna información sobre si el producto es resistente al agua.
También existen grandes diferencias en los ingredientes de crema solar. Los dermatólogos recomiendan la llamada protección física. Dichos productos contienen cristales fabricados de minerales tamaño micro que reflejan rayos UV, indicó John. Cuanto mayor sea el número sustancias químicas que componen el producto, mayor es el riesgo de una reacción alérgica.
Tras ser expuesto a la luz solar, la piel necesita cuidado y calma.
“Un baño frío o una ducha fría es muy buena,” declaró Grohn. “Después, use una crema hidratante o gel con una gran cantidad de aloe vera.”