Las autoridades chinas publicaron ayer un decreto especial que castiga la malversación y los fraudes relacionados al socorro por el sismo del 12 de mayo en el suroeste de China.

El nuevo reglamento fue emitido de manera conjunta por la Comisión Central de Inspección de Disciplina (CCDI en inglés) y el Ministerio de Supervisión.

Los dos departamentos ordenaron a sus homólgos locales en varios niveles que hagan de este combate una labor básica y que investiguen y castiguen sin dudar la malversación.

El reglamento prohíbe la malversación y el fraude en la distribución del socorro, el comercio de los artículos de alivio y otros delitos.

Las instituciones e individuos, funcionarios líderes en especial, que se descubra que participaron en esas actividades serán severamente castigados por el Partido Comunista y el gobierno.

Los casos de los que violen la ley serán presentados ante los departamentos judiciales para su proceso, indica.

Hasta hoy jueves, se han donado 37.300 millones de yuanes (alrededor de 5.330 millones de dólares USA) en efectivo y artículos provenientes de donadores nacionales y extranjeros.

La Oficina Nacional de Auditorías (ONA) dijo inmediatamente después del sismo del 12 de mayo que auditaría el uso de efectivo y artículos para las regiones del desastre para garantizar que los recursos sean manejados y usados de manera adecuada y oportuna.

Los auditores investigarán y se encargarán de cualquier intento de esconder, interceptar o mal utilizar los donativos, señaló la ONA.

El sismo cobró al menos 68.516 vidas, dejó heridas a 365.399 personas, dejó 19.350 desaparecidas y a más de 15 millones de personas sin hogar.