El Ministerio de Hacienda de China dijo ayer que ha destinado otros 1.000 millones de yuanes (144 millones de dólares) a financiar diversos planes y medidas para hacer frente al problema de los lagos que se formaron con los corrimientos de tierra provocados por el terremoto del pasado 12 de mayo.
El dinero se utilizará para reparar los embalses de pequeño tamaño que han resultado más dañados en las regiones afectadas por el seísmo de 8,0 grados de magnitud en la escala de Richter de hace dos semanas, señaló el ministerio en un comunicado.
Antes, la cartera había destinado 4 millones de yuanes a ayudar a las autoridades locales a minimizar las amenazas de los "lagos del terremoto", de acuerdo con el comunicado.
Muchos de estos lagos están en peligro de desbordarse e inundar las áreas situadas en los cursos inferiores de los ríos.
El seísmo, que afectó a la provincia suroccidental china de Sichuan, además de otras provincias vecinas, como Gansu y Shaanxi, desencadenó corrimientos de tierra que crearon 34 "lagos del terremoto" sólo en Sichuan. De ellos, 28 todavía presentan riesgo de desbordarse, de acuerdo con la oficina central de alivio del Ministerio de Recursos Hídricos.
El más grande y que presenta una situación de mayor gravedad es el lago de Tangjiashan. Hasta el martes, retenía 130 millones de metros cúbicos de agua y el nivel del agua era de 727,02 metros de altura, 1,82 metros más que el día anterior y sólo unos 25 metros por debajo de las partes más bajas de la barrera, declaró el ingeniero jefe de la citada cartera, Liu Ning.
Cientos de trabajadores, que utilizaban 40 grandes equipos para remover tierra, incluyendo máquinas excavadoras, han estado trabajando sin descanso en lo alto de la barrera de Tangjiashan, para construir un canal de desvío del agua.
Se estima que un total de 158.000 personas tendrán que trasladarse en caso de que se rompa el dique formado por las rocas desprendidas en el lago de Tangjiashan. Hasta ahora, más de 100. 000 personas en la ciudad de Mianyang han sido realojadas.
