A las 14:28 del 19 de mayo, miles de turistas se detuvieron en la sección Badaling de la Gran Muralla, la bandera nacional de china fue bajada a media asta, y se suspendió la venta de billetes en la zona turística. Todos los automóviles que pasaban por allí se pararon e hicieron sonar sus bocinas.
“El gobierno chino respondió con rapidez y se encargó de la situación adecuadamente pese a las dificultades imprevistas. Por eso, creo que los chinos son tan fuertes como la Gran Muralla, y que nunca caerán.” expresó Falah Ala, profesor de inglés, después de los tres minutos de silencio.
El Señor Liu Qiang, quien realizó un viaje especial a Beijing desde la provincia de Shandong, manifestó que la Gran Muralla es el símbolo de la nación china, por lo que al expresar sus condolencias a las víctimas del terremoto desde la Gran Muralla, tuvo una mayor sensación de fuerza cohesiva del país.