El pronóstico de una fuerte réplica en la sudoccidental china de Sichuan anunciado el lunes provocó que muchos residentes locales abandonaran su hogar durante la noche del lunes pasado, una semana después del terremoto de 8.0 grados en la escala abierta de Richter, que causó la muerte de más de 34.000 personas.
El buró sismológico local pronosticó la noche del lunes pasado que una réplica de entre 6 y 7 grados en la escala Richter azotaría el lunes o el martes el distrito de Wenchuan, a unos 159 kilómetros de Chengdu, capital provincial de Sichuan.
Wenchuan fue el epicentro del devastador terremoto del pasado 12 de mayo.
El buró avisó a las autoridades locales y equipos de rescate y alivio para que estuvieran listos para acudir a las emergencias.
El pronóstico, que fue reiterado por las estaciones televisivas y de radiodifusión en Sichuan, provocó la movilización de muchos residentes en Chengdu, que abandonaron sus hogares. Los vehículos privados que trataron salir del centro de la ciudad congestionaron las carreteras entre la noche del lunes pasado y la mañana de hoy martes. El atasco fue empeorado por vehículos que forman largas colas frente a las estaciones de gasolina.
Muchos residentes en Chengdu pasaron una noche insomne, esperando sentados el escape en caso de que sucediera una emergencia.
Los residentes de las afueras y los distritos rurales de Chengdu también dejaron la casa por miedo al sismo.