El uso de la inyección letal será expandido para sustituir a las ejecuciones con fusiles, manifestó un alto oficial judicial.
Jiang Xingchang, vicepresidente del Tribunal Popular Supremo (SPC, siglas en inglés), señaló que la mitad de los 404 tribunales populares intermedios del país – los cuales llevan a cabo a la mayoría de las ejecuciones – usan inyecciones letales.
“Es considerado más humano y con el tiempo será usado en todos los tribunales populares intermedios,” informó Jiang a China Daily sin revelar una agenda.
Para lograr el objetivo, el SPC asignará la toxina usada en la inyección a los tribunales locales bajo una estricta supervisión, añadió él. Actualmente, los oficiales del tribunal han venido a Beijing por la toxina.
Una enmienda realizada a la Ley de Procedimiento Criminal del país en 1997 hizo que las ejecuciones mediante la inyección letal fuesen una opción.
Kunming se convirtió en la primera ciudad para probarla el año que viene, seguido de Wuhan, Shanghai, Chengdu, Hangzhou, Luoyang, así como otras ciudades.
Jiang indicó que el uso de la inyección letal ha recibido una respuesta favorable de toda la sociedad, incluyendo a aquellos condenados a muerte y sus familias.
Pese a que el país retiene la pena de muerte, éste debería de ser aplicado únicamente a un “número extremadamente pequeño” de delincuentes, mencionó el Jefe de Justicia Xiao Yang en una entrevista separada con China Daily, quien añadió que: “Cada pena de muerte tiene que resistir la prueba del tiempo.”
Xiao señaló que aboliendo la pena de muerte o sólo limitando el uso de la condena de muerte son una tendencia global, y que “China también está trabajando hacia esa dirección.”
No obstante, He subrayó que el objetivo no se puede lograr de la noche a la mañana.
“No podemos hablar sobre abolir o controlar el uso de condenas de muertes de forma abstracta sin considerar la realidad y las condiciones de seguridad social,” declaró Xiao.
El jefe de justicia también expresó que es poco realista que China suprima la pena de muerte – incluso para criminales no violentos – a corto plazo por la fuerte creencia de la gente sobre el concepto de “ojo por ojo y una vida por vida”.