Lei Guiying, la última “mujer de consuelo” (esclava sexual durante la guerra) en Nanjing falleció hace varios días, una noticia triste para los historiadores, ya que la mayoría de los testigos de aquel periodo de historia de China han muerto.

Zhou Fenying, una antigua “mujer de consuelo” de más de 90 años, proveniente de Rugao de la provincia de Jiangsu, fue lo suficientemente valiente para admitir la historia ante el público recientemente. Los historiadores chinos están requiriendo una preocupación generalizada para preservar los documentos e informaciones sobre la historia de la “mujer de consuelo”.

Según una investigación actual, la mayoría de las “mujeres de consuelo” vivas en la actualidad viven en las provincias de Heilongjiang, Shanxi y Hainan, y algunas se pueden encontrar en Shanghai, así como en las provincias de Jiangsu, Hunan, Hubei, Hebei, Henan y Shandong. En la actualidad, 45 de ellas han hecho pública su historia para dar testimonio de aquel periodo de historia. Ninguna de ellas vive una vida acomodada, y la mayoría son muy mayores.

No existe ninguna política particular para garantizar sus vidas, señaló Su, un historiador. El Centro de Investigación de Mujer de Consuelo ha comenzado un proyecto de donación para apoyar a las antiguas “mujeres de consuelo”, mediante la cual cada una podía recibir una pensión de 100 yuanes cada mes. Más tarde, la pensión aumentó hasta 200 yuanes, pero aún no era suficiente.

Un gran número de prostíbulos estuvieron ubicados en Nanjing durante la guerra anti japonesa, incluyendo la mayor de todas. Sin embargo, no se encontraron a demasiados testigos allí. “Hemos encontrado condones y esteras en los prostíbulos, pero no son evidencias concluyentes,” concluyó Jiang Shenghong, un profesor de historia de la Universidad de Nanjing.

Actualmente, muchas “mujeres de consuelo” antiguas y sus familias no quieren revelar el pasado vergonzoso de las mujeres, por lo tanto, la mayoría de ellas prefieren esconder su identidad

(10/05/2007, spanish.china.org.cn)