Además, agregó su compañero Duncan Collis, la espeleología es mucho más accesible por su carácter informal. Los espeleólogos simplemente necesitan ser conscientes de los métodos de seguridad y estar rigurosamente entrenados en lugar de asociarse a grupos montañistas que buscan las grandes ganancias.
La primera ocasión en que Lynch se interesó en las cuevas fue en 1998. Como miembro del Club de Espeleología de la Universidad de Cambridge, el Club Subterráneo y Cueva Rosa Roja (Hong Meigui), Gruta Sur de California y la Sociedad Nacional de Espeleología, ella también se ofreció para la Fundación Investigadora de Cuevas. Desde entonces ha viajado el mundo como espeleóloga y ha estado en Estados Unidos, Reino Unido, Irlanda, Austria, España y México.
En el 2000, Lynch recibió una subvención de la Fundación Americana Durfee y el Programa Aventura Capital de China, para explorar las cuevas de esta nación por un año. El amor que floreció en ella por el país hizo que decidiera quedarse aquí después de transcurrir el tiempo previsto.
De 32 años, Collis comenzó en la espeleología en 1994, también con el Club de Espeleología de la Universidad de Cambridge, y desde entonces es miembro de la Asociación Británica de Investigación de Cuevas.