Una empresa llamada Terrafugia, con sede en la ciudad de Worboun de Massachussets, Estados Unidos, empezó hace poco a aceptar pedidos. Según su plan, el primer “coche volador” del mundo inventado por ella saldrá a la venta el año 2009.
El coche volador, denominado “Transition” y a un precio de 127 libras esterlinas (aproximadamente 190.000 dólares), será entregado al comprador en la segunda mitad del año venidero.
Este vehículo es en realidad un avión deportivo ligero de uso terrestre-aéreo. Su fuselaje mide 5,8 metros y su envergadura, 8,4 metros. Antes de despegar necesita recorrer una distancia en la pista. Puede volar a una velocidad de 185 km/hora y alcanzar al máximo a 741 kilómetros sin escala. Después de ser plegadas sus alas verticalmente a ambos lados del cuerpo, el vehículo se convierte en un coche capaz de recorrer en la carretera.
Este coche utiliza un motor Rotax 912S de cuatro tiempos, con una potencia de 73,5 kilowatios. Emplea la gasolina sin plomo y puede cargar combustible en cualquier gasolinera común.
La portavoz de la empresa expone que el “Transition” puede ser estacionado generalmente en el garaje convencional de casa. El conductor puede lograr, mediante una serie de instrucciones sencillas, el cambio libre entre avión y coche, dejando de sufrir las restricciones climáticas. Sin embargo, sólo los poseedores de la licencia de aviación están facultados para introducir los códigos para extender las alas.