Una persona de mediana edad, que sintió dolor de cabeza después de beber alcohol, creyó estar constipada y tomó paracetamol, lo que le causó la intoxicación y postración de los órganos internos de su cuerpo y le condujo a la muerte.

El paracetamol produce mayor daño al cuerpo humano, porque causa irritación en el hígado. Tomar de una vez más o menos 30 tabletas de paracetamol es suficiente para conducir la muerte. Aunque una sola dosis de este medicamento causa una carga extra al hígado. Si encima de ello se combina con el se convertirá muy rápidamente en un veneno mortífero. Actualmente, muchas medicinas contienen paracetamol, por eso es muy posible causar la intoxicación aunque se consuma sólo una tableta con una bebida alcohólica.

El paracetamol, también conocido como acetaminophen, un antipirético y antiflogístico que tiene el efecto de aliviar el dolor, se aplica ampliamente como medicamento no prescrito.

Según las investigaciones, muchas personas toman estas pastillas para el dolor de cabeza, después de beber alcohol, y los resultados tampoco son menores que en aquellos que al mismo tiempo ingieren medicamentos contra la gripe. Son muy peligrosas tanto la primera como la última variante.

Desde hace mucho tiempo, la gente cree que el paracetamol, siendo un medicamento no prescrito, es seguro para el cuerpo y no ha prestado suficiente importancia a sus efectos secundarios, que se reflejan en la falta de apetito, vómitos, sudoraciones y dolor del abdomen, entre otros síntomas.

Según estudios de investigadores estadounidenses entre 300 enfermos que padecen postración del hígado, el 38% de los casos tienen que ver con el paracetamol. Y en otro grupo de pacientes que sufren graves daño del hígado, el 35% está relacionado con el paracetamol. La mayoría de estos son casos ocasionales, causados por descuidos de la gente y debían ser prevenibles al principio.