En el 58, Torres remató a placer una pasada de Navas desde dentro del área, y cinco minutos después, el portero Roche salió por un balón en largo que se le escapó por debajo de los brazos y Villa, muy atento, hizo su tercer gol de la noche.

Pese a la abultada goleada, la afición del Maracaná no dejó de animar a Tahití y a gritar cada vez que el equipo pasaba de tres cuartos de campo.

Cuando el equipo lograba combinar algunos pases, los gritos de "olé, olé", resonaban en el Maracaná, y cada parada de Roche a tiro español era largamente celebrada.

Mata, en una jugada personal, hizo el octavo aprovechando un rebote de la defensa en la frontal en el minuto 66. España iba en busca de su récord goleador, el 13 a 0 que le endosó a Bulgaria en 1933, aunque se quedó en el camino de lograrlo.

El público estalló de alegría cuando Torres, en el 78, erró un penalti que mandó al larguero, tras unas manos de Aitamai dentro del área. Sin embargo, segundos después, el atacante del Chelsea se rehizo del error superando en carrera al portero Roche y haciendo el noveno gol de la noche.