Durante las dinastías Qin y Han, muchas casas y palacios, particularmente los pertenecientes a nobles, burócratas y terratenientes, eran decorados con murales, según precisan documentos históricos. Además de decoración para las paredes, los murales del palacio imperial de la dinastía Han, con sus descripciones de inteligentes emperadores y sabios, funcionarios leales e hijos filiales, también jugaron un importante papel en la formación de los valores personales.
Apenas se han descubierto unos pocos murales palaciegos de las dinastías Qin y Han. Una pared mutilada fue desenterrada del sitio No. 3 del Palacio Xianyang de la dinastía Qin, el mural palaciego más antiguo descubierto hasta la fecha. Con sus imágenes de carruajes, caballos y casas, este mural exhibe una simplicidad primitiva, representando las sencillas técnicas de las primeras pinturas.
Mural de carruaje tirado por caballos (dinastía Qin)