La pareja invitó a toda la gente joven de China a visitar la exhibición y aprender un ‘poco más’ sobre la historia del Tibet.

Shang Guihua, de 60 años, trajo a la exhibición a su nieto de seis años.

“Aunque está muy joven para entender lo que ha pasado allá en las montañas, quiero que comience a saber. Hubo una exhibición como esta cuando yo tenía 10 años, todavía recuerdo la impresión que me dejó ver a ‘un siervo’ al que le había arrancado la piel”, comentó Shang.

Cuando hizo referencia a las diferencias entre la exhibición actual y aquella de hace 50 años, la mujer subrayó que hoy día la organización de las salas es mejor y que la utilización de alta tecnología hace todo más fácil”.

En lo que respecta a las actividades secesionistas del Dalai Lama, algunos visitantes externaron su indignación y apoyaron de ‘viva voz’ su apoyo por una China unida.

“Yo veo mal que el Dalai esté intentando separar al Tibet de China”, dijo uno de ellos. “Lo que ese hombre hace jamás será apoyado por el pueblo”, adujo otra.

“A mi manera de ver las cosas, no hubiera habido un nuevo Tibet de no ser por el PCC. El Tibet no se hubiera liberado ni alcanzado la estabilidad y prosperidad de la actualidad a no ser por el Ejército Popular de Liberación. El Dalai es un reaccionario que no es fiel a sus promesas y la supuesta ‘Independencia del Tibet’ es sólo un truco sucio utilizado por fuerzas occidentales hostiles a China” expresó un furibundo visitante.