En un esfuerzo por convertirse en ‘padres’, una pareja de pingüinos homosexuales está tratando de robar los huevos de alguna pareja heterosexual, trascendio en la prensa internacional.

Se tienen reportes de varias parejas de pingüinos homosexuals en distintos zoológicos a lo largo del mundo

En algunos de sus intentos, se les ha descubierto intentando suplantar los huevos por rocas sin que la pareja que está empollando (¿empingüinando?) lo perciba.

Pero el engaño, que se asemeja más a un fraude, ha sido descubierto por otros pingüinos del zoológico, quienes han tomado medidas como el aislamiento de la homosexual pareja de ‘roba-huevos’. Una medida más práctica, fue la tomada por las autoridades del zoológico, quienes con la intención de traer de vuelta la tranquilidad a la comunidad pingüinesca, han separado a la anormal pareja del resto de los miembros de la comunidad, al menos mientras dura la temporada de reproducción, trascendió.

Uno de los cuidadores del zoológico de Harbín, noreste de China, donde habita esta polémica pareja, explicó que ellos tienen el instinto natural de convertirse en padres, sin importar cuál sea su atracción sexual.

“Una de las responsabilidades que la adultez pingüina trae consigo es el cuidado de huevos. Aunque la producción de huevos propios es una imposibilidad biológica para esta pareja, el deseo natural sigue ahí”, justificó el cuidador en entrevista con el rotativo Los Tiempos de Austria.

“No es discriminarlos. Pero por el bien del grupo debemos separarlos para que, durante la época de empollamiento, no hagan de las suyas”, explicó.

A través de la historia, miles de casos de homosexualidad animal han sido registrados. Sin embargo, los pingüinos gay han causado un inusitado revuelo en la opinión pública. Hace unos años, un zoológico alemán provocó la ira de las organizaciones de defensa de los derechos homosexuales al intentar forzar a un grupo de pingüinos homosexuales a sostener actos reproductivos con un grupo de hembras suecas llevadas hasta Alemania especialmente para seducir a los desorientados pingüinos. No obstante, el proyecto fue abandonado cuando las autoridades del zoológico se percataron de que ‘las aves’ no mostraron ningún interés por sus ‘contrapartes’ suecas.

En 2002, una pareja de pingüinos del zoológico de Nueva York, que había pasado ocho felices años juntos, fueron forzados a separarse cuando los intolerantes cuidadores descubrieron que los dos eran ‘machos’.