La locura del High School Musical ha estallado en Sidney, Australia, donde miles de fans se han congregado para adorar a las estrellas Zac Efron, Vanessa Hudgens y Ashley Tisdale.

Niños, jóvenes y sus padres, todos en manada, han esperado a las afueras de los cinemas Greater Union y hecho interminables filas para presenciar la premiere del High School Musical 3: Senior Year.

Algunos de los fanes han estado ahí desde las 8 de la mañana para tener una posición de lujo al momento de intentar buscar un autografo de las estrellas de Disney.

“Es impresionante”, dijo Hudgens. Recibió muchos regalos de sus admiradores, entre ellos una caja de los ricos y deliciosos chocolates Tim Tam. “Son mis favoritos”, dijo lloriqueando. “Es tan dulce de su parte, son estas pequeñas cositas las que cuentan en la vida”, se atrevió a decir.

El High School Musical se trata de la historia de un capitán de equipo de basketball, Troy (Efron) y una muy inteligente pero tímida Gabriella (Hudgens) quienes, en conjunto, descubren que comparten la secreta pasión del canto y tratan de ingresar al musical estudiantil.

En la tercera parte del filme, los estudiantes están por graduarse, y tienen que tomar decisiones muy fuertes sobre la vida y el futuro, lo que comprometerá su relación.

Efron, cuya relación con Hudgens va más allá de la ficción holliwoodesca, causó varios desmayos entre la multitud de acaloradas mujeres. Antes de desaparecer, Efron comentó que terminar el proyecto del High School Musical le dejaba un leve sabor amargo. “Amo ser parte de esto, me gustaría poder hacerlo para siempre, pero sé que tengo que crecer, seguir adelante”, concluyó.