Hace poco, el restaurante Kentucky de Yangzhou empezó a vender churros para el desayuno. Según el restaurante, los churros, libres de la añadidura de alumbre, siguen siendo crujientes en el exterior y tiernos en el interior, cuya ventaja en lo que concierne a la salud supone un reto para los churros tradicionales de China. No obstante, durante una visita secreta, nuestro reportero descubrió que los churros de Kentucky, semejantes en tamaño a las trenzas fritas con un gusto algo parecido al Ciba (comestible preparado con harina de arroz glutinoso) no han obtenido la aprobación de los clientes.

Recientemente, Kentucky, el mayor ganador en el mercado chino entre los restaurantes de cadena internacionales, impulsó una de sus acciones “al estilo chino” más importantes: vender tentempiés chinos - churros. En las grandes ciudades como Shanghai y Beijing, ya se había empezado a ofrecer churros fritos desde principios del año, aunque en Yangzhou es cosa de los últimos días.

Tras enterarse de que Kentucky vendía churros, el señor Zheng fue a probarlas muy de madrugada lleno de curiosidad. Cada barra costaba 3 yuanes, y como el señor Zheng ya estaba preparado psíquicamente, compró 4 para asegurarse que estaría lleno. Fuera de lo había imaginado, al ver los churros, Zheng se quedó aturdido. Los churros se parecían mucho a Ciba, comestible preparado con harina de arroz glutinoso, eran tan pequeños que no superaban los 12 centímetros de largo, y además, después de probar un bocado, no saboreó lo esponjoso y lo crujiente de los churros.

Tragándose un churro después de dos bocados, no tardó mucho en comerse los cuatro churros, algo que no llenó su estómago. El Sr. Zheng se compró otras 4, pero no logró sentirse lleno. Después de beberse algo, apenas se sintió lleno. Este “banquete de churros” le costó 30 yuanes, un precio bastante caro.

Después de lo que le sucedió al señor Zheng, se puede considerar que los churros seguros de Kentucky forman una mejor combinación con diversas sopas de arroz. Además, para aquellos clientes que les gusta probar lo más nuevo, este restaurante les ofrece varias combinaciones como los churros y leche, churros y té con leche, y churros con café. No obstante, nuestra reportera descubrió que estos churros seguros no han sido bien recibidos por los consumidores.

A las 8 de la mañana, nuestra reportera llegó a la tienda Darunfa de Kentucky. Como el supermercado de al lado todavía no había abierto, el negocio no era muy próspero. Hasta las 9.30 horas, aparte de nuestra reportera que compró dos churros fritos, ningún otro vecino compró este comestible como desayuno.

Un comensal informó a nuestra reportera que el que Kentucky lanzara los churros fritos para el desayuno sólo tenía como objetivo atraer la vista de los ciudadanos. En cuanto al precio y el gusto bocal, dista mucho de las costumbres de consumo de los ciudadanos. A lo más, se ha añadido la opción de “churros y Coca cola” para los oficinistas, la cual da una sensación estar de moda. Son mucho más caras en comparación con las de Yonghe Doujiang en cuanto a precio y materias primas. Desde luego, estos churros seguros deben de ser garantizados en lo que concierne a la higiene y calidad.