Brasil estudia la posibilidad de producir en plantas estatales del país otras dos de las 17 medicinas que forman parte del cóctel que el gobierno distribuye gratuitamente entre los portadores del síndrome de inmunodeficiencia adquirida (SIDA).
El anuncio de que Brasil estudia producir esas dos medicinas fue hecho hoy por el ministro de Salud, José Gomes Temporao, durante la ceremonia en la que el gobierno recibió el primer lote de Efavirenz genérico producido en el país.
Las nuevas drogas que podrán ser producidas en el país son el Tenofovir y el Atazanozir, actualmente importadas y cuya patente podrá ser negociada para que pueda producirse sin neceSIDAd de desconocer los derechos de propiedad intelectual.
En marzo del 2007, Brasil desconoció la patente del Efavirenz, una medicina del laboratorio Merk, para poder producirla localmente, alegando razones de interés público y el hecho de que Merk se hubiera negado a reducir su precio en Brasil.
El desconocimiento de una patente por interés público está previsto en las normas de la Organización Mundial del Comercio (OMC).
Tras suspender la licencia, el Ministerio de Salud le encomendó al estatal Instituto de Tecnología de Fármacos (Farmanguinhos), mayor laboratorio del país, la misión de desarrollar un genérico del Efavirenz y de producirlo a nivel comercial.
Brasil produce actualmente ocho medicinas contra el SIDA e importa las otras nueve, que adquiere de laboratorios extranjeros, por lo que el aumento de las fabricadas nacionalmente reducirá los costos de la política nacional de combate al SIDA.
El primer lote del genérico desarrollado nacionalmente, entregado oficialmente hoy al Ministerio de Salud, podrá ser distribuido en las próximas semanas gratuitamente entre los enfermos de SIDA.
Este primer lote de Efavirenz recibido hoy por el ministro Gomes está compuesto por 2,1 millones de comprimidos. La encomienda inicial hecha por el Ministerio de Salud fue de 15 millones de comprimidos para 2009.
El objetivo para un futuro, según Gomes Temporao, es que la producción nacional abastezca toda la demanda brasileña del producto (30 millones de comprimidos al año) a partir del 2010.
De las cerca de 185.000 personas registradas oficialmente con SIDA en Brasil, unas 85.000 reciben gratuitamente el Efavirenz.
El ministro calificó la entrega de las medicinas como un momento histórico que refleja la capacidad técnica, científica e industrial de Brasil para enfrentar un problema de salud pública.
Mientras que la píldora importada de Efavirenz le costaba a Brasil 1,56 dólares por unidad, la producida en el país cuesta cerca de 60 centavos de dólar. Fin