China rechazó los comentarios hechos por consejeros lituanos que expresaron su apoyo a la afirmación del Dalai Lama de que "China invadió el Tíbet", y subrayó que el Tíbet nunca fue un país independiente.
"El Tíbet nunca ha sido un país independiente, lo cual es un hecho histórico sólido. Esperamos que los consejeros correspondientes puedan entender mejor la historia", declaró la vocera del Ministerio de Relaciones Exteriores de China, Jiang Yu, en una conferencia de prensa regular en respuesta a una pregunta sobre el asunto.
Ni Jiang ni los reporteros que hicieron la pregunta mencionaron los nombres de esos consejeros.
Jiang señaló que el Tíbet ha sido parte del territorio de China desde tiempos antiguos. Los asuntos del Tíbet atañen a la soberanía e integridad territorial de China y son asuntos internos de China, expresó.
El gobierno central y sus predecesores han ejercido una efectiva soberanía sobre el Tíbet sin interrupción desde la Dinastía Yuan (1271-1368 d.c.) en el siglo XIII, dijo.
Este año se cumple el 50 aniversario de la reforma democrática de la Región Autónoma del Tíbet. El Tíbet era una sociedad en decadencia en el sistema feudal bajo el régimen teocrático a mediados del siglo XX.
Antes de 1959, el 14° Dalai Lama, como líder del Budismo en el Tíbet y jefe del gobierno local tibetano, monopolizaba el poder político y religioso.
"La abolición de la servidumbre feudal, al mismo tiempo que la abolición del régimen feudal en países europeos, es de gran importancia en la historia de los derechos humanos mundiales. Los sectores político, económico y cultural del Tíbet han registrado grandes cambios en las últimas cinco décadas. La gente de todos los grupos étnicos en el Tíbet gozan actualmente de los derechos asentados en la Constitución y las leyes sobre autonomía regional nacional. Sus niveles de vida mejoraron en un amplio margen", dijo Jiang.
"El gobierno y la población de China tienen una firme postura sobre esos asuntos y no cederán ante ninguna presión extranjera, ni harán ninguna concesión. Esperamos que la comunidad internacional respete ampliamente y apoye los esfuerzos hechos por el gobierno chino para mantener la soberanía e integridad territorial del país así como los intereses fundamentales de la gente de todos los grupos étnicos, incluyendo el pueblo tibetano".
La vocera comentó que China mantendrá y mejorará el sistema de autonomía regional de sus minorías étnicas, apoyará el desarrollo social y económico del Tíbet y garantizará los intereses de todos los grupos étnicos.