El crecimiento en cooperación educativa también ha sido destacado. China y España firmaron un acuerdo en 2007 para reconocerse mutuamente los grados académicos de educación superior, eso condujo a un rápido incremento en el intercambio estudiantil.
Más de 3.000 chinos estaban estudiando en España en 2008, en contraste con los menos de 700 de 2005, mientras que el número de estudiantes españoles en China también se incrementó a cerca de 1.000 con respecto a los cerca de 300 previos.
La amistad entre las dos naciones se manifestó en los donativos y asistencia ofrecidos por el gobierno y corporaciones españoles tras el devastador terremoto en la provincia de Sichuan, suroeste de China, en mayo pasado.
Ambos países creen que existe un enorme potencial para la mayor cooperación y que deben trabajar juntos para intensificar los contactos de alto nivel, consolidar la confianza política mutua y ampliar la cooperación comercial y de otro tipo.