La crisis financiera y económica mundial podría tener efectos adversos sobre la salud pública y los países tienen que tomar medidas para evitar este resultado, dijo hoy la directora general de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Margaret Chan.

"Los países de todos los niveles de desarrollo económico están preocupados por el impacto de la crisis financiera sobre la salud", señaló.

"Los funcionarios temen que la salud en sus países pueda empeorar a medida que aumenta el desempleo, fallan las redes de seguridad para la protección social, los ahorros y las pensiones se erosionan y el gasto en salud baja", dijo Chan en una reunión de la OMS sobre el tema.

"Los funcionarios también temen que los actuales niveles de financiamiento para el desarrollo internacional de la salud puedan no mantenerse", dijo.

Chan exhortó a los países a "aprovechar toda oportunidad para proteger a la población y evitar los efectos adversos sobre la salud".

"Los ministerios de Salud y Relaciones Exteriores necesitan una serie de argumentos apremiantes para convencer a otros ministerios de que protejan el financiamiento para la salud a nivel nacional e internacional", dijo. Fin