Amnistía Internacional (AI) denunció hoy una "ola de violencia policial" contra comunidades mapuche en el sur de Chile, donde los indígenas mantienen un añejo conflicto de tierras con el Estado chileno.
En un comunicado, AI indicó que está "preocupada por la reciente ola de violencia policial hacia mapuches menores de edad, en las comunidades de Esteban Yevilao, en Tirúa y de José Guiñón, en Ercilla", 600 kilómetros al sur de Santiago.
"La cifra de niños víctimas sigue en aumento, en la comunidad Esteban Yevilao", donde los Carabineros, policía militarizada, allanaron una vivienda y amenazaron a cuatro niños apuntándoles con armas, se añadió en el documento.
En el lugar, "una niña de siete días de vida resultó intoxicada con una bomba lacrimógena lanzada al interior de su vivienda", se agregó.
El 9 de diciembre pasado el domicilio del abogado de causas indígenas, Lorenzo Morales Cortés, fue allanado por la policía así como el de sus padres en un acto que defensor calificó "intimidatorio".
En enero pasado el activista indígena y estudiante universitario Matías Catrileo murió por disparos de los Carabineros en un confuso incidente en la zona de Ercilla en la Región de la Araucanía.
Los mapuches, la etnia más numerosa de Chile, reclama la restitución de sus tierras ancestrales que le fueron arrebatadas por conquistadores europeos en el siglo XVI y por el Estado chileno en los siglos XIX y XX.
El relator de Asuntos Indígenas de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), el mexicano Rodolfo Stavenhagen, denunció hace cuatro años la criminalización de las protestas mapuches por parte del Estado chileno.
Según el relator de la ONU, esa criminalización se traduce en la denominación de atentados terroristas a las quemas de predios que explotan las empresas forestales por parte de activistas indígenas. Fin