La lucha contra el síndrome de la inmunodeficiencia adquirida (SIDA) ha logrado algunos avances en el Caribe, donde la persistencia de la enfermedad se mantiene como uno de los grandes desafíos en la región. Estudios indican que 55 personas se contagian a diario en el Caribe, lo cual implica unos 20.000 afectados al año, según autoridades autoridades de la Organización Panamericana de la Salud citadas hoy por la prensa.
Los programas aplicados en la zona, algunos con cooperación internacional, han fructificado, incluido el mayor acceso de los enfermos a medicamentos retrovirales o el aumento de la información para la prevención. La epidemia tiende a estabilizarse en algunos países caribeños, dijeron autoridades de la Organización Panamericana de la Salud en declaraciones difundidas hoy por la prensa.
El Caribe se mantiene la segunda zona mundial con mayor tasa de infectados, después del Africa Subsahariana. Los fallecimientos anuales por sida alcanzan los 14.000 caribeños.
El sida es la fase terminal de un paciente infectado con el virus de la inmunodeficiencia humana (VIH). No obstante, y a pesar de los programas educativos, sólo el año pasado 10.000 enfermos recibieron tratamiento médico. Fin