La XVI Cumbre de Líderes del Foro de Cooperación Económica Asia Pacífico (APEC, por sus siglas en inglés) finalizó hoy en Lima con la convicción de que el libre comercio y la inversión, y no el proteccionismo, serán clave para detener y rescatar a las naciones y regiones de la crisis financiera y económica mundial.
Al término de la jornada de hoy, segunda y última de la reunión, los líderes de las 21 economías que integran este foro de diálogo informal, donde los acuerdos se adoptan por consenso y no son de obligatorio cumplimiento, emitieron la Declaración de Lima, documento final de la Semana de Líderes que incluye recomendaciones sobre temas como integración económica, cambio climático y seguridad alimentaria.
Antes de la ceremonia de cierre, los líderes se tomaron la tradicional "foto de familia" vestidos con un traje peruano.
Entre los temas que aborda la Declaración de Lima están: "Liberalización y Facilitación del Comercio y las Inversiones", "Integración Económica Regional", "Responsabilidad Social Corporativa", "Seguridad Alimentaria", "Apoyo a la Ronda de Doha" y "Seguridad Humana".
A esta magna cita asisten,entre otros, los presidentes de China, Hu Jintao; Estados Unidos, George Bush; Rusia, Dmitri Medvédev; Corea del Sur, Lee Myung-bak; Chile, Michelle Bachelet; y México, Felipe Calderón, así como los primeros ministros de Japón, Taro Aso; Canadá, Stephen Harper; Australia, Kevin Rudd; y Nueva Zelanda, John Key.
Esta semana APEC en Perú incluyó reuniones de Altos Funcionarios, encargados de preparar los proyectos de acuerdos; del Consejo Empresarial de APEC; y un encuentro sobre las pequeñas y medianas empresas, de los cuales surgieron las recomendaciones que han sido consideradas por los líderes en la cumbre.
El sábado, la 16 reunión anual de líderes emitió una declaración específica sobre la situación económica global, expresando su respaldo a las medidas decididas por el Grupo de los 20 para afrontar la crisis económica.
Defendieron el libre comercio como arma contra la crisis y como medida concreta se comprometieron a no levantar una sola barrera proteccionista en 12 meses a partir de ahora.
Desde sus inicios en 1989, APEC ha trabajado para reducir los aranceles y otras barreras comerciales en la región del Asia Pacífico, lo cual ha permitido desarrollar a las economías nacionales y regionales e incrementar notablemente las exportaciones.
En esta cumbre nuevamente ha sido clave el análisis para alcanzar las denominadas “Metas de Bogor”, cuyo cometido es lograr un comercio y una inversión libre y abierta en el Asia Pacífico el 2010, para las economías desarrolladas, y, el 2020, para las economías en desarrollo.
La concreción de estas metas, que fueron adoptadas por los líderes en 1994, en Bogor, Indonesia, no se realizará en esos plazos debido al retrasado del proceso de liberalización del comercio dentro de APEC y el fracaso de la Ronda de Doha para el libre comercio mundial.
Ante la compleja situación derivada de la crisis financiera, esta cumbre adoptó el compromiso de reestablecer la confianza en las economías y mantener la región Asia Pacífico en la senda del desarrollo, aplicando profundas reformas para estabilizar los sectores financieros y fortalecer el crecimiento económico y promover la inversión.
Pero no sólo la economía ha centrado la atención de cumbre, sino también los temas políticos de la coyuntura actual del mundo.
Por ejemplo, el líder chino, Hu Jintao, ha sostenido encuentros con los líderes de Perú, Estados Unidos, Corea del Sur y otros, para repasar el estado actual de las relaciones bilaterales.
El presidente ruso, Dmitri Medvédev, que ha mantenido un bajo perfil en esta cumbre, sostuvo una reunión con el mandatario estadounidense, George Bush, donde abordaron, entre otros temas, la situación en Georgia, tras la retirada de las tropas rusas en esa ex república soviética.
También se reunió con el primer ministro japonés, Taro Aso, con quien se encontró por primera vez, en medio de comentarios sobre la reclamación de Japón de las Islas Kuriles, para tratar los vínculos bilaterales.
Los presidentes de Perú, Alan García, y Chile, Michelle Bachelet, celebraron una “reunión especial” para analizar el desenvolvimiento de los lazos bilaterales, que sufrieron un enfriamiento por el reclamo presentado por Lima en la Corte Internacional de La Haya para revisar los límites marítimos.
Para Perú, que ha ofrecido una impecable organización de la cumbre, ésta le servirá para impulsar el comercio y las inversiones bilaterales con las economías asiáticas de APEC, sobre todo el anuncio de la conclusión de las negociaciones de un tratado de libre comercio con China, y el inicio de los contactos para otro con Japón y Corea del Sur.
El mensaje del presidente peruano en esta cumbre se resume en su convicción de que “vamos a ganarle a la crisis”, instando a los gobiernos y empresarios a actuar unidos para lograrlo.
La próxima cumbre será en Singapur.
La presencia del presidente de China en la cumbre y su gira por varios países latinoamericanos confirmaron el interés del país asiático de extender sus relaciones económicas y políticas en América Latina.
La presencia en Lima de tantos dirigentes mundiales generó unas reforzadas medidas de seguridad, con la intervención de unos 39.000 agentes de policía y miles de efectivos militares, incluyendo una fragata de la Armada peruana y un portaaviones estadounidense con aviones F16.
APEC está formado por Australia, Brunei, Canadá, Chile, China, Corea del Sur, Estados Unidos, Filipinas, Hong Kong de China, Indonesia, Japón, Malasia, México, Nueva Zelandia, Papúa Nueva Guinea, Perú, Rusia, Singapur, Tailandia, Taipei de China y Vietnam.
A nivel mundial, APEC representa el 45% de la población, el 47% del comercio y el 55% del Producto Interno Bruto (PIB), el cual llega a los 20 billones de dólares.