El ministro de Hacienda británico, Alistair Darling, quien está de visita, dijo ayer en Beijing que el Tíbet es un problema interno de China y que el Reino Unido (RU) se opone a la independencia tibetana.
Darling, que visita China como representante especial del primer ministro británico Gordon Brown, hizo estas declaraciones durante su reunión con el consejero de Estado chino, Dai Bingguo, informó el Ministerio del Exterior chino en un comunicado de prensa.
Darling también dijo que boicotear las Olimpiadas de Beijing sería un error y que su país se opone a politizar el evento y expresó sus deseos para el éxito de la organización de los Juegos Olímpicos de Beijing.
Según Darling, Brown asistirá a la ceremonia de clausura de los juegos este verano, agrega el comunicado de prensa.
Durante la reunión, Dai presentó la postura china acerca de los disturbios tibetanos.
Las dos partes también discutieron el desarrollo de la asociación general y estratégica China-RU y acordaron impulsar de manera conjunta sus relaciones.
Darling llegó a Beijing esta tarde para el primer diálogo económico y financiero China-RU.
Darling también se reunirá con el primer ministro Wen Jiabao y sostendrá conversaciones con el viceprimer Wang Qishang y luego hará una visita al municipio de Chongqing, según la cancillería.