China dijo que se siente "sumamente insatisfecha" por la discusión y comentarios de los ministros de Relaciones Exteriores de la Unión Europea (UE) sobre la cuestión del Tíbet, durante la reunión que sostuvieron en Eslovenia.
"La cuestión del Tíbet es completamente un asunto interno de China. Ningún país extranjero ni organización internacional tiene derecho a inmiscuirse en ella", dijo la vocera del Ministerio de Relaciones Exteriores, Jiang Yu.
Los ministros de Relaciones Exteriores de la UE emitieron el sábado una declaración sobre la situación en el Tíbet después de reunirse en Brdo, Eslovenia.
"Esperamos firmemente que la UE y sus estados miembros hagan una distinción clara entre lo correcto y lo incorrecto, condenen explícitamente los crímenes violentos de golpizas, destrozos, saqueo e incendios y a todos los infractores, y eviten asumir criterios dobles", dijo la vocera.
La UE no debe avivar las heridas de las víctimas inocentes de los disturbios del 14 de marzo en Lhasa ni enviar un mensaje equivocado a la comunidad internacional ni a la camarilla del Dalai ni alentar a los secesionistas tibetanos en sus crímenes violentos, afirmó la vocera.
Los disturbios alteraron las actividades culturales y religiosas de la población local y sabotearon el orden social. Estos son crímenes violentos que han violado seriamente los derechos humanos y puesto en peligro la seguridad de la vida y propiedad de la población, afirmó la vocera.
"Todo país responsable del mundo tomaría medidas acordes con la ley para detener ese tipo de crímenes violentos", afirmó.
El gobierno de la Región Autónoma del Tíbet ha ejercido una gran moderación en todo el proceso de manejo del incidente, dijo la vocera, quien agregó que el gobierno ha mantenido la justicia social, restablecido el orden social lo más pronto posible y obtenido el apoyo de la población, incluida la etnia tibetana.
El gobierno chino ha otorgado gran importancia a la protección de los derechos humanos y a la preservación de la cultura y religión tibetanas. Ha invertido una gran cantidad de mano de obra y de fondos para proteger, preservar y construir instituciones culturales y religiosas, para satisfacer las necesidades de los tibetanos.
China tiene actualmente más de 50 instituciones dedicadas al Estudio del Tíbet y la mayoría de sus académicos son de la etnia tibetana, agregó Jiang.
Con respecto al idioma tibetano, dijo que el tibetano y el chino son enseñados y usados en el Tíbet, y que el tibetano es el idioma principal. El tibetano es un curso importante en las escuelas de todo tipo.
La vocera agregó que el idioma tibetano se ha convertido en el primer idioma usado por un grupo minoritario étnico en China para el cual se ha establecido un estándar internacional.
Además, el gobierno central ha invertido fondos enormes en la preservación y mantenimiento de monasterios y sitios religiosos, incluido el Palacio Potala y el Templo Jokhang.
Existen más de 1.780 sitios religiosos en el Tíbet con más de 46. 000 monjes y monjas, dijo Jiang, y agregó que la libertad religiosa es respetada completamente en el Tíbet.
Con respecto a la postura de China hacia el Dalai Lama, dijo que la política del gobierno chino siempre ha sido firme.
Siempre y cuando el Dalai abandone la defensa de la "independencia del Tíbet" y cese las actividades destinadas a dividir a la patria, especialmente las actividades para avivar y tramar crímenes violentos en el Tíbet y en otras regiones y para sabotear los próximos Juegos Olímpicos, y acepte que el Tíbet y Taiwan son partes inalienables de China, el gobierno chino estaría dispuesto a continuar los contactos y conversaciones con él.
"No sólo debemos escuchar lo que dice, sino ver lo que hace", dijo Jiang.