Pakistán, Rusia y algunos otros países expresaron hoy su oposición a cualquier intento de socavar la soberanía de China y de politizar los Juegos Olímpicos.

El gobierno de Pakistán subrayó su postura hoy de que el Tíbet es una parte inalienable de China y que se opone firmemente a cualquier intento de socavar la soberanía e integridad territorial de China.

"El Tíbet es una parte inalienable del territorio chino. Los asuntos del Tíbet son completamente asuntos internos de China", dijo el vocero de la Oficina de Relaciones Exteriores paquistaní, Muhammad Sadiq, en una entrevista con Xinhua.

El relevo de la antorcha de los Juegos Olímpicos Beijing 2008 llegará a la capital paquistaní, Islamabad, el mes próximo.

Al comentar sobre el evento próximo, Sadiq dijo que "los Juegos Olímpicos son una gala deportiva para toda la gente del mundo entero. Pakistán cree que los Juegos Olímpicos de Beijing serán un gran éxito".

"El gobierno paquistaní se está preparando para el relevo de antorcha. Nos oponemos a cualquier intento de politizar los Juegos Olímpicos", dijo.

El ministerio ruso de Relaciones Exteriores dijo en un comunicado hoy que Rusia "considera al Tíbet como una parte inseparable de China y cree que el arreglo de las relaciones con el Dalai Lama es un asunto interno de la República Popular China".

El Ministerio de Relaciones Exteriores condenó la politización de los Juegos Olímpicos de Verano 2008 en China, informó la agencia de noticias Interfax rusa.

"Nos gustaría insistir que cualquier intento de politizar los Juegos Olímpicos de Verano 2008 chinos es inaceptable", dijo el Departamento de Información y Prensa del ministerio.

Los disturbios en Lhasa el viernes pasado causaron muchas pérdidas de vidas y de propiedad y alteraron gravemente el orden social, dijo el jefe del gobierno de la Región Autónoma del Tíbet.

Trece civiles inocentes murieron quemados o apuñalados, dijo hoy Qiangba Puncog, presidente del gobierno de la Región Autónoma del Tíbet, en una conferencia de prensa en Beijing.

Los disturbios fueron "organizados" y "premeditados" por la camarilla del Dalai Lama, dijo.

El gobierno alemán también se manifestó explícitamente hoy contra un boicot a los Juegos Olímpicos de Beijing en respuesta a la situación en el Tíbet y reiteró su compromiso con la política de Una China.

Thomas Steg, vocero del gobierno alemán dijo en una conferencia de prensa que un boicot a la Olimpiada de Beijing no logrará más que afectar a los atletas que se han estado preparando durante mucho tiempo para los juegos.

La primera ministra de Nueva Zelanda, Helen Clark, también dijo hoy que no reconocer la independencia del Tíbet es la posición clara del gobierno neozelandés.

Clark desestimó un llamamiento a un boicot olímpico y dijo que no cree que tenga apoyo internacional.

El ministro chino de Relaciones Exteriores, Yang Jiechi, dijo en una conferencia de prensa hoy en Beijing que sólo existen muy pocos individuos y grupos contra China, quienes desean politizar la Olimpiada de Beijing y no pueden representar a la comunidad internacional.

Más de 100 líderes de Estado o gobierno de todo el mundo expresaron su disposición a asistir a la Olimpiada de Beijing en agosto. Fin