El diálogo prevaleció de nuevo en las relaciones sino-estadounidenses, favoreciendo una serie de acuerdos alcanzados ayer por la tarde para profundizar la colaboración en cuestiones difíciles como la seguridad de los productos chinos, energía y protección ambiental.
La viceprimera ministra china , Wu Yi, calificó la reunión a puerta cerrada de la decimaoctava Comisión Conjunta de Comercio de "sustancial" y como "muestra del sincero deseo de buena voluntad por ambas partes para solucionar cuestiones económicas y comerciales mediante el diálogo pacífico".
El éxito de la reunión de ayer generó un tono positivo para el tercer Diálogo Económico Estratégico China-EEUU, que comenzó hoy en Beijing, y ofrece un impulso férreo al desarrollo comercial, indicó Wu.
La seguridad de los productos chinos, una cuestión que ha generado importantes disputas desde la pasada primavera, parece haber dominado el orden del día, habida cuenta que tres de los 14 acuerdos y memorandos alcanzados están relacionados con la cooperación en materia de seguridad en la producción de medicamentos, tecnología sanitaria, alimentos y piensos, alcohol y tabaco.
Asimismo, ambas partes acordaron facilitar el desplazamiento de grupos de turistas chinos a Estados Unidos, la creación de un foro en materia de tecnología para la protección del medio ambiente y cooperación industrial, así como un trabajo más cercano en materia de ciencias agrícolas, tecnología y el desarrollo de biocombustibles.
El encuentro también ha supuesto la elaboración de una guía para el desarrollo del comercio estratégico y de alta tecnología entre ambas naciones, en un esfuerzo patente para efrentarse al desequilibrio comercial crónico.
El secretario de Comercio de Estados Unidos, Carlos Gutiérrez, y Wu Yi alertaron ayer por la mañana del peligro de la adopción de medidas proteccionistas, mostrando similares deseos de lograr un compromiso con la apertura en la reunión anual y el subsiguiente diálogo económico.
"Queremos reducir nuestro déficit incrementando las exportaciones, no reduciendo las importaciones", subrayó Gutiérrez.
La últimas cifras de las aduanas china s muestran que entre enero y noviembre, el comercio entre China y Estados Unidos creció un 15,7% con respecto al mismo periodo del pasado año, para alcanzar los 276.210 millones de dólares.
En noviembre, las exportaciones estadounidenses a China se elevaron un 17,7% para alcanzar 6.525 millones de dólares, mientras que las importaciones crecieron 2,6 puntos porcentuales menos, aunque aún suponen 21.700 millones de dólares.
"Durante cinco años consecutivos, China ha sido el mercado de exportación de mayor crecimiento para Estados Unidos", expresó Wu Yi en la ceremonia de inauguración, quien espera que China se convierta en el tercer mayor importador de productos estadounidenses tras Canadá y México.
La viceprimera ministra china , que anunció su retirada de la política el próximo año, mostró su sincero deseo para que los departamentos gubernamentales de ambas naciones con competencias en la materia puedan aplicar plenamente el amplio consenso alcanzado en la reunión, ampliar la cooperación, limar las disparidades y trabajar de forma más cercana para lograr un brillante futuro en las relaciones económicas y comerciales sino- estadounidenses.
Wu se expresó con gravedad para criticar a las "notas disonantes" en los vínculos comerciales entre China y Estados Unidos, ejemplificadas por lo que ella describió como un fuerte crecimiento en el número de medidas parlamentarias contra China, la politización del comercio y la economía, el endurecimiento de los controles sobre ciertas exportaciones a China y una exageración deliberada de los problemas de seguridad en los alimentos y productos chinos, la cual ha dañado gravemente la reputación y la imagen de China.
El pasado abril, la administración de Bush, presionada por el Congreso, adoptó medidas contra China ante la Organización Mundial del Comercio en materia de violación de los derechos de propiedad intelectual y la existencia de barreras comerciales contra los libros, la música y las películas estadounidenses.
El pasado mes, la OMC decidió crear un panel de expertos para investigar las supuestas restricciones aplicadas por China.
"China es una nación en vías de desarrollo responsable, no sólo en términos de protección de los derechos de propiedad intelectual, sino también en la mejora de la calidad de sus productos y en el equilibrio de la balanza comercial. Nuestras actitudes son claras y nuestras acciones decididas", expresó Wu.
La confianza en los productos chinos ha comenzado a recuperarse tras el lanzamiento por parte de las autoridades china s de una campaña nacional de cuatro meses de duración para sensibilizar a la población sobre la cuestión de la calidad de los productos.
Según las estadísticas de los servicios aduaneros de la provincia meridional china de Guangdong, la mayor base productora de juguetes del país, las exportaciones de las jugueteras china s se elevaron a 4.940 millones de dólares en los primeros diez meses del 2007, un aumento del 22,9% respecto al mismo periodo del 2006. Un 79% de estos productos fueron exportados a Estados Unidos y Europa.
La provincia de Guangdong fabrica el 70% de los juguetes chinos exportados y ocupa casi un 50% del mercado internacional.
Wu pidió a ambas partes mostrar capacidad de previsión, pensar estratégicamente y facilitar las consultas y la colaboración.
"La imposición de restricciones al mercado o la recurrencia a medidas de protección sólo dañará los intereses de ambas partes y será inútil para solucionar los problemas", aseguró la viceprimera ministra.
Rechazando los rumores sobre una reducción de las políticas de apertura de China, Wu reiteró que su gobierno no modificará su posición ante el uso de capital extranjero. "La puerta china siempre ha estado y, sin ninguna duda, estará abierta al mundo exterior", subrayó.
El Diálogo Económico Estratégico China-EEUU, lanzado por el presidente chino, Hu Jintao, y su homólogo estadounidense, George W. Bush, en septiembre del 2006, comenzó hoy y terminará mañana jueves.
El principal foco de atención del diálogo estará centrado en seis temas: los desafíos de la globalización, la integración comercial, el desarrollo de una economía equilibrada, el impacto económico de las decisiones en materia energética, crecimiento económico y sostenibilidad e inversión bilateral.