La economía china experimentó en 2008 el crecimiento más lento en los últimos siete años, incrementándose un 9 por ciento, situación que pone manifesto que la crisis financiera global continúa afectando el motor económico mundial, según los datos oficiales publicados ayer jueves.
El año pasado, el Producto Interno Bruto (PIB) de China se situó en 30 mil 067 billones de yuanes (4 mil 421billones de dólares), informó Ma Jiantang, director del Buró Nacional de Estadísticas, durante una rueda de prensa.
La tasa de crecimiento del 9 por ciento fue la más lenta desde 2001, año en que la tasa anual fue del 8,3 por ciento, y es la primera vez que se registra un nivel inferior a dos dígitos desde 2003.
El funcionario precisó que la tasa de crecimiento para el cuarto trimestre de 2008 cayó al 6,8 por ciento desde el 9 por ciento en el tercer trimestre, y el 9,9 por ciento en los tres primeros cuartos del año.
El crecimiento económico mostró una "corrección evidente" en 2008, pero la evolución durante todo el año pasado fue mejor que la de otros países afectados por la agitación financiera global, indicó Zhang Liqun, experto del Centro de Investigación del Desarrollo del Consejo de Estado, gabinete chino.
Zhang atribuyó el débil crecimiento en el cuarto trimestre a la reducción en la producción industrial, debido a que las existencias se acumularon por la fuerte caída de la demanda extranjera en ese período.
Las exportaciones, que representan cerca de un tercio del PIB, disminuyeron un 2,8 por ciento interanual para alcanzar un valor de 111 mil 160 millones de dólares en diciembre, después de haber registrado un retroceso del 2,2 por ciento en noviembre respecto al mismo lapso del año anterior.
Wang Xiaoguang, experto del Instituto de Investigación Económica de la Comisión Nacional de Desarrollo y Reforma, sostuvo que el crecimiento del 6,8 por ciento en el cuarto trimestre del año pasado no era señal de un "aterrizaje forzoso", sino que se trataba de un "reajuste" necesario respecto a la rápida expansión previa.
"Esta ronda de reajuste a la baja no cesará en un año ni en varios trimestres sino que durará probablemente dos o tres años, lo que constituye una situación normal", indicó Wang.
Un reporte divulgado hoy por el banco británico Standard Chartered califica el crecimiento del 6,8 por ciento de los últimos tres meses del año pasado de "aceptable" y agrega que no obstante los datos en general aportan "señales mixtas".
"Es probable que en el cuarto trimestre el crecimiento efectivo haya sido inexistente en comparación con el tercero, y hasta podría haber sido ligeramente negativo", reza el documento.