Los gigantes automovilísticos mundiales informaron de un incremento de sus ventas en China, el segundo mayor mercado mundial de vehículos motorizados después de Estados Unidos, a pesar de la desalentadora perspectiva del mercado internacional.

Los tres grandes fabricantes de autos más importantes de Detroit (EEUU), General Motors, Ford y Chrysler, experimentaron el año pasado un descenso de doble dígito de sus ventas en Estados Unidos, ya que la crisis financiera global provocó una contracción de la demanda. Además, General Motors y Chrysler advirtieron de una posible quiebra en medio de la crisis, por lo que recibieron una inyección del gobierno de 13.400 millones de dólares, en diciembre pasado.

En cambio, en el mercado chino las dos compañías registraron un considerable incremento de ventas.

General Motors afirmó que sus ventas en China aumentaron un 6,1 por ciento en 2008 respecto al año anterior, para alcanzar 1,09 millones de unidades, al tiempo que la cifra se encogió un 22,7 por ciento en el mercado estadounidense.

Por su parte, Chrysler duplicó sus ventas en el mercado chino el año pasado, a pesar de sufrir un descenso del 30 por ciento en su país de origen.

Ford Motors anunció el pasado lunes que vendió 306.306 vehículos en China en 2008, aunque no ofreció las cifras comparativas de 2007.

Sin embargo, su empresa de capital mixto, la compañía de automóviles Chang'an Ford Mazda declaró que sus ventas sufrieron un caída interanual del 5,9 por ciento el año pasado, para situarse en 204.334 unidades, respecto a las 217.000 de 2007.

El mayor productor de autos de Europa, Volkswagen AG, anunció un incremento del 12,5 por ciento en sus ventas el año pasado en China, superando así un millón de unidades, gracias a su patrocinio exitoso de los Juegos Olímpicos de Beijing.

Toyota Motors, de Japón, también registró un aumento del 17 por ciento en sus ventas en China, mientras que su rival, Honda Motors, anunció un crecimiento del 11,7 por ciento.

A pesar de que los gigantes automovilísticos concluyeran el año 2008 con un excelente rendimiento en China, el mercado de autos del país asiático no fue inmune a la recesión global de la industria.

Los productores de autos chinos reportaron un aumento del 6,7 por ciento de sus ventas en 2008 respecto al año anterior, la cifra más baja de los últimos diez años, informó la Asociación de Fabricantes de Automóviles de China.

La institución predijo que el ritmo de crecimiento de ventas de autos caería hasta el 5 por ciento este año, debido a la debilitación de la confianza de los consumidores en medio de la ralentización del crecimiento económico.

El ritmo de crecimiento del Producto Interior Bruto de China bajó al nueve por ciento en los primeros tres trimestres del año pasado, cifra que representa un notable descenso respecto al 10,4 por ciento registrado en la primera mitad de 2008 y el 11,9 por ciento en 2007.

El gobierno chino está tomando medidas de estímulo para reforzar el sector, entre las cuales podrían figurar recortes de impuestos sobre la adquisición de autos e incentivos al desarrollo de vehículos de baja emisión y de energía limpia.