El Ministerio de Comercio de China aprobó la compra de la compañía estadounidense Anheuser-Busch Cos. (A-B) por parte de InBev, un gigante productor de cerveza de Bélgica, y dijo que la fusión no dañará la competencia en el mercado de cerveza chino.

"El Ministerio de Comercio decidió no prohibir la fusión porque no limitará la competencia en el mercado chino en términos de regiones y productos", dijo el ministerio en un comunicado.

El ministerio sí puso restricciones a las dos compañías para que no incrementen su participación accionaria en fabricantes chinos de cerveza, a fin de "reducir el impacto negativo de la competencia futura en el mercado nacional".

Asimismo, el ministerio instó a InBev que no busque acciones de China Resources Snow Breweries ni de Yanjing Beer Group, los otros dos principales protagonistas del mercado cervecero chino.

InBev también debe informar al ministerio si se hace algún cambio en la estructura de control de accionistas de la nueva compañía.

El ministerio tomó su decisión después de investigar la adquisición con base en el Artículo 27 de la Ley Antimonopolios de China.

InBev anunció su intención de adquirir todas las acciones de A-B por un total de 52 mil millones de dólares (70 dólares por acción). Si tiene éxito, la fusión creará al mayor fabricante de cerveza del mundo por ventas y ayudará a InBev a incrementar su participación en el mercado estadounidense.

Los convenios obtuvieron la aprobación de los accionistas de A-B y de China, pero aún necesita las autorizaciones de Estados Unidos y de Reino Unido.

La Ley Antimonopolios de China obliga a InBev y a A-B a informar al Ministerio de Comercio para que apruebe la transacción porque sus ingresos de 2007 en China llegaron a 5 mil 800 millones de yuanes (852 millones de dólares), muy por arriba del umbral que debe reportarse.