El emperador Huizong (Noviembre 2, 1082 – Junio 4, 1135) fue el octavo y uno de las emperadores más famosos de la Dinastía Song de China, con una vida personal dedicada al lujo, sofisticación y arte, pero terminando en tragedia.
Reinando desde 1100 hasta 1126, el Emperador Huizong no fue un emperador modelo. Él descuidó al ejército mientras el Song de China se debilitaba y quedaba al merced de los enemigos extranjeros. Para principios del año 1126 de la dinastía Jin, un fuerte enemigo del norte atacó Kaifeng, la capital del Imperio Song. Afligido con pánico, Huizong huyó mientras abandonaba sus obligaciones celestiales que el Cielo había conferido en él para proteger al imperio Chino. Gracias a los valientes oficiales que encontraron el coraje para no seguir a su líder, la dinastía Jin no ocupó la ciudad de Kaifeng. El régimen de Song se vio obligado a firmar algunos tratados humillantes y pagar tributo a Jin. Finalmente, los Jin conquistaron la capital, capturando a Huizong y a la mayoría de su corte. Afortunadamente, su hijo, más tarde conocido como el Emperador Gaozong, logró escapar y establecer la dinastía Song del sur, cuya capital era la hermosa ciudad de Hangzhou. Huizong murió en cautiverio en pobreza total en la remota área del norte de Manchuria, donde pasó los últimos 9 trágicos años de su vida.
Pese a ser un fracaso total en dirigir asuntos militares y estatales, Huizong es probablemente uno de los mayores mecenas que cualquier nación haya tenido. No sólo un gran mecenas, pero siendo también un gran artista, él destacó en la pintura de pájaros y flores y también escribió dignas poesías. Sus pinturas son consideradas como las mejores obras maestras de China, con su reproducción fina de ‘Damas de Corte Preparando Seda Recién Tejida’ siendo la única copia de su gran obra maestra Tang. Su caligrafía única se convirtió en un estilo independiente conocido como el estilo “Esbelto de Oro” (Shou Jin Ti). El nombre “Esbelto de Oro” vino del hecho que la escritura de Huizong se parecía a un filamento de oro, torcido y espiral. Este estilo de caligrafía es una fuerte desviación de cualquier cosa vista antes, demostrando de esa forma que aunque Huizong no era muy valiente en el campo de batalla, sí contaba con la valentía para innovar en el campo estético. Su caligrafía, más famoso que su pintura, es extremadamente original, los trazos son extendidos hasta sus límites extremos y el resultado es un dinamismo fascinante que hasta hoy en día, sobresale como una interpretación independiente y llamativo de los caracteres chinos.
