BEIJING, 10 jul (Xinhua) -- El Ministerio de Industria y Tecnología Informática de China comenzó a solicitar opiniones públicas sobre una reciente regulación que otorga puntos a los fabricantes e importadores de carros tradicionales según su consumo de combustible.

La medida también impacta en los vehículos de nueva energía (VNE), que se miden de acuerdo con su producción.

La revisión de la regulación planea categorizar los automóviles alimentados con metanol y éter como vehículos tradicionales e impulsar a los fabricantes a acelerar la producción de VNEs entre 2021 y 2023, de acuerdo con un documento publicado el martes por el ministerio.

Con el fin de reducir el consumo energético y aumentar las ventas de VNEs, China impuso desde abril de 2018 estrictas regulaciones a fabricantes e importadores, quienes reciben dos puntuaciones separadas por la eficiencia del consumo energético de los vehículos tradicionales y la producción de los VNEs.

Si no pueden acumular créditos suficientes, ya sean coches tradicionales o VNE, los fabricantes responsables podrían ser sancionadas y sus autos vedados de las carreteras chinas.

El país asiático experimentó un crecimiento robusto en las ventas de los VNEs en el primer semestre de este año, que ascendieron a 577.000 unidades, lo que implica un aumento interanual del 66 por ciento, según datos de la Asociación de Fabricantes de Automóviles de China. Fin