La próxima visita del presidente de China, Xi Jinping, a Latinoamérica mejorará la asociación de cooperación integral y marcará el inicio de una nueva era en las relaciones bilaterales.
Xi realizará visitas de Estado a Ecuador, Perú y Chile entre el 17 y el 23 de noviembre y asistirá a la 24ª Reunión de Líderes Económicos del Foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico (APEC), que tendrá lugar del 19 al 20 del mismo mes en Lima, Perú.
Será la tercera visita del mandatario chino a Latinoamérica desde que asumió la presidencia en marzo de 2013, y la visita a Ecuador será la primera desde que los dos países iniciaran relaciones diplomáticas en 1980.
Este viaje pone de manifiesto que China y América Latina se están esforzando por lograr una cooperación mutuamente beneficiosa y un desarrrollo común bajo los principios de la confianza, el beneficio y el aprendizaje recíprocos.
Durante la visita de Xi, China discutirá acuerdos de libre comercio y cooperación en los sectores del comercio electrónico, la capacidad de producción industrial, los parques industriales y las infraestructuras.
En la actualidad, Latinomérica, afectada por la debilidad del mercado global y la caída de los precios de las materias primas, necesita capital y tecnología para mejorar su capacidad manufacturera, reducir su dependencia de las exportaciones de recursos primarios e impulsar la transformación económica.
Dado que China cuenta con equipamiento rentable y América Latina necesita infraestructuras y modernización industrial, la visita del presidente chino se produce en un momento en el que existen numerosas oportunidades de expandir la actual relación.
De hecho, los lazos China-América Latina están avanzando. En julio de 2014, Xi y los líderes de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC) anunciaron el establecimiento del Foro China-CELAC. En enero de 2015, China y la CELAC firmaron un plan de cooperación de cinco años en la primera reunión ministerial del foro de cooperación celebrada en Beijing.
El foro de cooperación marcó el comienzo de una nueva era de beneficio mutuo y desarrollo común y mejoró la colaboración bilateral en diversos terrenos.
En la esfera política, los vínculos han avanzado en gran medida gracias a los intercambios de visitas de alto nivel. Perú, el primer país latinoamericano en establecer una asociación estratégica integral con China, será la segunda parada del viaje de Xi. Esta se produce poco después de la visita de Estado que el presidente peruano, Pedro Pablo Kuczynski, realizó a China en septiembre y que fue su primera visita de Estado desde que asumiera el cargo.
Estas frecuentes visitas de alto nivel consolidan la tradicional amistad y allanan el camino para la futura cooperación.
Chile, la última parada en el viaje de Xi, fue la primera nación suramericana en forjar lazos diplomáticos con China, la primera en América Latina en firmar un acuerdo bilateral con China sobre la entrada del país asiático en la Organización Mundial del Comercio, y en rubricar un tratado de libre comercio con China.
En el sector económico y comercial, el volumen comercial entre China y América Latina se ha multiplicado por más de 20 durante la última década hasta situarse en 236.500 millones de dólares en 2015. Actualmente, China es el segundo mayor socio comercial y la tercera fuente de inversión de Latinomérica, mientras que ésta constituye el séptimo mayor socio comercial de China.
En su calidad de economía emergente y mayor país en vías de desarrollo del mundo, China siempre se ha posicionado al lado de los países en desarrollo y ha cumplido con sus debidas responsabilidades de acuerdo con su estatus de potencia económica global.
China ha ofrecido apoyo monetario de dos millones de dólares y ayuda humanitaria valorada en 9,2 millones a Ecuador después del fatal terremoto ocurrido en abril en el que murieron 668 personas, 4.859 resultaron heridas y 80.000 tuvieron que ser evacuadas.
Además, China ha ofrecido apoyo financiero y tecnológico para ayudar a los países latinoamericanos a reducir el déficit en infraestructuras.
Gracias al apoyo financiero de China, la planta hidroeléctrica Coca Codo Sinclair, la mayor de su tipo jamás construida por una compañía china y localizada en el nordeste de Ecuador, generará 1.500 megavatios de energía y satisfará el 30 por ciento de la demanda del país suramericano.
La planta, junto con otras levantadas por empresas chinas, ayudará a Ecuador a transformarse, desde un país hambriento de energía, en una exportadora de energía limpia, y contribuirá en gran medida al desarrollo económico del país.
Dentro del marco del Foro China-CELAC, la cooperación ha florecido asimismo en otras áreas, como la educación, los intercambios entre personas y la cultura.
China ha prometido a las naciones latinoamericanas y caribeñas 6.000 becas gubernamentales en un plazo de cinco años desde 2014.
Además, se han organizado en China y América Latina diversas actividades culturales destinadas a fomentar el entendimiento mutuo y consolidar la base para una amistad duradera, y 2016 es el "Año de los Intercambios Culturales" entre China y la región.
Se cree que la visita de Xi consolidará la tradicional amistad, fomentará el desarrollo común y construirá una comunidad de destino compartido entre China y América Latina.