El gobierno central de China aumentó su apoyo para el desarrollo sostenible de la región autónoma del Tíbet desde la tercera plenaria del XVIII Comité Central del Partido Comunista de China (PCCh) en 2013.

La región autónoma celebrará este mes el 50° aniversario de su establecimiento.

El gobierno chino considera el mejoramiento del nivel de vida de la población en el Tíbet como el objetivo final de sus políticas para la región.

El gobierno central ha prometido permitir que el pueblo tibetano goce de una mejor educación, empleos estables, más ingresos y seguridad social, mejor atención médica y una vida cómoda en un bello ambiente.

Además, busca fortalecer la unidad étnica en el Tíbet para garantizar la estabilidad, que es la base del desarrollo en la región.

En una reunión del Buró Político del Comité Central del PCCh realizada en julio de este año, se determinó que el gobierno dará prioridad a la unidad étnica, luchará contra el secesionismo y promoverá los intercambios y la prosperidad entre diferentes grupos étnicos en el Tíbet.

El presidente chino, Xi Jinping, también advirtió a las autoridades locales no desarrollar la economía tibetana a costa del ambiente natural de la región.

La pérdida por la degradación ambiental supera por mucho las ganancias económicas en el Tíbet, dijo Xi al secretario del partido en un distrito del Tíbet durante un seminario realizado en enero en Beijing.

El gobierno central ofreció políticas preferenciales en la región para estimular su desarrollo social y económico. La región autónoma del Tíbet es la primera en China en recibir educación gratuita por 15 años de la primera a la preparatoria.

Un proyecto de atención a la salud cubre todas las áreas agrícolas y de pastoreo en el Tíbet. Los agricultores y pastores tienen derecho a una revisión médica gratuita una vez al año. Los niños con enfermedades cardiacas congénitas son atendidos gratuitamente.

La red de electricidad en la región ha mejorado y se integró a la red de otras partes de China para garantizar un adecuado suministro en época de invierno.

Setenta por ciento de los ingresos fiscales de la región autónoma se destinan para mejorar el sustento de las personas. La mayoría de los graduados universitarios en el Tíbet tienen empleo y una creciente red de seguridad social ha permitido servicios médicos gratuitos para pastores y atención a cerca de 6.000 huérfanos.

Alrededor de 460.000 familias rurales se han mudado a casas nuevas más cómodas. El uso de un sistema central de calefacción en Lhasa ha dado fin a la primitiva práctica de calentarse quemando estiércol de ganado que prevaleció por generaciones. F