China sancionará a las compañías, sean domésticas o foráneas, que estén involucradas en la fabricación de productos falsificados o de mala calidad, que participen en fraudes o engaños, o que roben secretos comerciales, aseveró hoy miércoles el primer ministro chino, Li Keqiang.
El gobierno chino mejorará la supervisión y desarrollará su papel de árbitro en el mercado, confirmó el premier en su discurso ante la Reunión Anual de Nuevos Líderes 2014, o el Foro de Davos de Verano, celebrada en la ciudad portuaria norteña de Tianjin.
"Hemos de compilar una lista de las responsabilidades gubernamentales para definir cómo el gobierno debe regular el mercado. El gobierno debe cumplir todos los puntos incluidos en ella", sostuvo.
"Sólo así podremos construir un entorno mercantil favorable a las operaciones honestas y al juego limpio e inyectar vitalidad a los negocios y fomentar la innovación y creatividad", analizó.
El político chino dijo que ser indulgente con los infractores de la ley equivale a violarla, lo que podría resultar en que "el dinero malo desplace al bueno".
China penalizará las violaciones graves de los derechos de la propiedad intelectual de acuerdo con la ley a través de medidas como la imposición de multas altas para que los infractores paguen un precio elevado, explicó.
Durante su discurso, Li también aclaró que China mantendrá sus políticas sobre el capital extranjero y mejorará y estandarizará el entorno para los negocios con el objetivo de atraer mayor comercio e inversión del exterior. F