La próxima visita de Estado del presidente chino, Xi Jinping, a Cuba abrirá una nueva etapa de desarrollo integral de las relaciones bilaterales, aseguró a Xinhua el embajador cubano en China, Alberto J. Blanco Silva.

Durante una entrevista exclusiva concedida a Xinhua, el embajador destacó la experiencia enriquecedora de más de medio siglo tras el establecimiento de las relaciones diplomáticas entre ambos países en 1960 y la madurez que han alcanzado los vínculos.

El mandatario chino partió el domingo hacia Brasil para asistir a la VI cumbre de líderes de BRICS (Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica) y realizar visitas de Estado a Brasil, Argentina, Venezuela y Cuba.

Se trata de la segunda gira latinoamericana del presidente chino tras la realizada en mayo del año pasado, que llevó a Xi a Trinidad y Tobago, Costa Rica y México.

Misntras mostraba a Xinhua la colección de fotos de visitas de alto nivel entre ambos países, que han sentado una base sólida en la confianza política mutua, Blanco, quien domina un fluido chino mandarín, subrayó que las sino-cubanas son unas relaciones que han soportado la prueba del tiempo y que se encuentran en su mejor etapa.

"Es una ocasión tan propicia para proyectar las relaciones bilaterales a medio plazo con todas sus potencialidades, además de compartir metas y objetivos comunes", señaló el diplomático, recordando el momento importante de la visita de Xi, que se produjo en medio del proceso de actualización del modelo económico y social que se viene implementando en Cuba.

Un área importante de cooperación la constituyen los intercambios de experiencias y las lecciones sobre la construcción del socialismo partiendo de las realidades de cada país, que según el embajador son de "mucha utilidad".

Otro terreno de relevancia es la inversión. Con la creación de la Zona Especial de Desarrollo Mariel en noviembre de 2013 y la entrada en vigor de la nueva ley de inversión extranjera, Cuba está ofreciendo importantes incentivos fiscales para atraer a los inversores.

Según Blanco, la biotecnología y la industria farmacéutica, las energías renovables, la industria agroalimentaria, la de envases y embalajes y las telecomunicaciones y la informática son los sectores de mayor interés y con mayores posibilidades para desarrollar negocios conjuntos entre ambas partes.

Por el momento, los proyectos de inversión chinos en la isla caribeña están avanzando lentamente por varios factores, pero una gran cantidad de empresas chinas han expresado su interés en promover la inversión en Cuba, lo que coincide en gran medida con el punto de vista de los académicos chinos.

Wu Baiyi, subdirector del Instituto de América Latina de la Academia China de Ciencias Sociales, expresó a Xinhua la necesidad de que se aumente la presencia de empresas chinas en el país insular, siendo China el mayor país socialista y en vías de desarrollo.

"Cuba ha logrado su inserción plena en América Latina y el Caribe", destacó Blanco al mencionar las ventajas de Cuba para atraer a la inversión extranjera.

China es el segundo mayor socio comercial de Cuba desde 2005, mientras que Cuba es el mayor socio del país asiático en la región caribeña, lo que coincide con el "avance impetuoso que han experimentado las relaciones entre China y Latinoamérica y el Caribe", recordó Blanco.

Un paso importante fue la decisión de crear un Foro China-Celac (Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños) tomada durante la cumbre del bloque celebrada en La Habana en enero de este año.

Se prevé que durante la estancia de Xi Jinping en Brasil se celebre un encuentro entre éste y varios mandatarios de la región, incluidos los de la troika ampliada y Brasil.

"La visita de Xi Jinping sin duda representará un nuevo hito en el curso ascendente de las relaciones bilaterales y de las relaciones entre China y América Latina y el Caribe", expresó el embajador cubano.