Ocho sospechosos involucrados en cinco incidentes de seguridad alimentaria han sido transferidos a órganos judiciales y otros 38 funcionarios han sido sancionados por negligencia en el cumplimiento de su deber, informó ayer miércoles el Ministerio de Supervisión de China.
En un caso, vendedores de la provincia oriental china de Anhui compraron, cocinaron y vendieron más de 25.000 kilogramos de carne de cerdo enfermo por un valor de 80.000 yuanes (13.200 dólares), según un comunicado publicado por la cartera.
En otro, nueve funcionarios de la provincia oriental de Shandong han sido castigados por supervisión inadecuada después de que las autoridades descubrieran que los agricultores locales habían usado un pesticida altamente tóxico en la plantación del jengibre, de acuerdo con el documento.
El ministerio urgió a los gobiernos de todos niveles a que aprendan de los escándalos de seguridad alimentaria y combatan con mano dura los delitos relacionados con los alimentos.