Las fuerzas armadas de China jamás han apoyado ningún tipo de ofensiva cibernética, por lo cual las acusaciones lanzadas por la empresa de seguridad cibernética estadounidense Mandiant carecen de ningún fundamento legal y factual, afirmó hoy miércoles Geng Yansheng, portavoz del Ministerio de Defensa Nacional.
La legislación china proscribe cualquier práctica que amenace la seguridad en el ciberespacio, y persigue de forma implacable los crímenes perpetrados contra ella, dijo Geng en una conferencia de prensa.
Mandiant publicó el lunes un informe en el que acusaba a una unidad militar secreta china en Shanghai de estar detrás de los ataques cibernéticos realizados contra compañías estadounidenses durante años.
El portavoz dijo que el informe de la empresa estadounidense es infundado, ya que basa sus conclusiones en que las direcciones IP desde las que se lanzaron los ataques estaban en China.
Este dato no es concluyente, ya que en primer lugar, es habitual que los ataques cibernéticos se realicen desde una IP robada, explicó el vocero, añadiendo que "esto sucede a diario".
En segundo lugar, no existe una definición clara y consistente de lo que es el ciberataque en el mundo. El informe carece de fundamento legal para acusar de ciberespionaje basándose sólo en la compilación de varias actividades virtuales diarias, dijo Geng.
Por último, el ciberataque es una práctica internacional, anónima y engañosa, debido a la dificultad para establecer su origen. Acusar de manera irresponsable no ayuda a solucionar el problema, indicó el portavoz.
Geng también manifestó que China es actualmente una de las principales víctimas de los ciberataques. Las estadísticas muestran que los usuarios militares chinos que se conecten a la red con frecuencia sufren ciberataques provenientes del extranjero. En estos casos, las direcciones IP indican que la mayor parte tienen su origen en Estados Unidos, destacó Geng, agregando que "no obstante, no señalamos a Estados Unidos en base a los descubrimientos mencionados, y cada país debe gestionar la ciberseguridad de una forma profesional y responsable".
Además, en cuanto a las críticas sobre los "ciberataques chinos" por parte de los políticos y los medios de comunicación extranjeros, la parte china tiene la voluntad de resolver estas cuestiones a través de la aplicación conjunta de la ley y las consultas con otros países.
Según el funcionario, el Ministerio de Seguridad Pública chino ha ayudado a más de 50 países y regiones en la investigación de unos 1.100 cibercrímenes desde 2004, y ha establecido cooperación bilateral en la aplicación de la ley con más de 30 países y regiones, incluyendo Estados Unidos, Reino Unido, Alemania y Rusia.
Las acusaciones unilaterales en los medios de comunicación no contribuyen a la resolución de los problemas, sino que dañan la cooperación existente, puntualizó.