El Partido Comunista de China (PCCh) nunca permitirá que su disciplina política sea un simple adorno, ni tolerará ningún "club privado" que marche por su cuenta.
Xi Jinping, secretario general del Comité Central del PCCh, dijo el martes que debe fortalecerse la construcción de la disciplina del PCCh y que debe salvaguardarse la unidad del Partido cuando la situación se vuelva complicada y las tareas más arduas.
Xi pidió a los miembros del PCCh que actúen al unísono, en un discurso que pronunció en la sesión plenaria de la Comisión Central de Control Disciplinario (CCCD) del PCCh, sostenida el lunes y martes.
La disciplina política es una parte vital de la disciplina del PCCh. Si un Partido carece de reglas sobre su dirección política, postura y conducta, se convierte simplemente en una colección de necios.
El PCCh ha sido capaz de alcanzar un logro tras otro en el proceso de la revolución, construcción y reforma de China porque ha sido equipada con ideales revolucionarios y sus miembros han observado la disciplina.
Permitir que cada uno de los miembros de un partido tome caminos separados y haga lo que le plazca ha hecho que grandes partidos políticos del mundo pierdan su unidad y su control del poder.
Para el PCCh, la disciplina política clara y estricta ha sido una tradición gloriosa y una ventaja distintiva. Sin embargo, aún existen algunos miembros y funcionarios del PCCh que no han acatado esa disciplina.
Algunos de ellos hacen declaraciones irresponsables sobre asuntos políticos importantes; algunos hacen creer que están de acuerdo con las decisiones del Comité Central, cuando en realidad están en desacuerdo; otros tienden a decir lo que quieren decir y hacer lo que quieren hacer.
El escándalo en que se vio involucrado el año pasado Bo Xilai, un ex miembro del Buró Político del Comité Central del PCCh, así como las acciones cometidas por su compinche Wang Lijun, son casos que entran en la última categoría.
Las organizaciones y funcionarios de todos los niveles del PCCh deben acatar los Estatutos del Partido y ser coherentes políticamente con el Comité Central tanto en pensamiento como en acción. El PCCh nunca tolerará ningún compromiso asumido por funcionarios o departamentos al llevar a cabo las decisiones tomadas por el Comité Central.
La disciplina férrea debe aplicarse con puño de hierro. No hay espacio para que los miembros crean que son lo suficientemente "especiales" como para no acatar la disciplina del PCCh. Las organizaciones y órganos disciplinarios del PCCh de todos los niveles deben abstenerse de asumir una actitud desenfadada hacia los miembros irresponsables del PCCh, especialmente hacia quienes están en posiciones dirigentes. Los infractores a la disciplina deben ser castigados de acuerdo con las normas y leyes.
La disciplina política estricta no debe sonar vacía entre los miembros del PCCh. En un partido que tiene más de 82 millones de miembros y la tarea de impulsar el desarrollo de China, debe aplicarse una disciplina de hierro para garantizar la solidaridad y la fortaleza. Fi