El XI Panchen Lama visitó hoy martes el templo Jokhang, el monasterio más importante de Lhasa, la capital de la región autónoma suroccidental china del Tíbet.

El XI Panchen Lama, Bainqen Erdini Qoigyijabu, líder espiritual del Budismo Tibetano, llegó sobre las 06:00 horas y fue recibido por lamas vestidos con el tradicional traje rojo oscuro y portando hada, un pañuelo de seda blanca que en el Tíbet simboliza respeto y bendición.

La reencarnación del X Panchen Lama recorrió las principales salas del monasterio, rindió homenajes y ofreció hadas a las estatuas del Buda, en especial al principal tesoro de Jokhang, una estatua a tamaño real del Buda Sakyamuni cuando éste tenía 12 años, donada al templo en el siglo VII por la princesa Wencheng de la dinastía Tang.

Frente a esta estatua, el actual Panchen Lama, cuyo nombre profano es Gyaencaen Norbu, fue elegido a los seis años como la reencarnación del X Panchen Erdeni a través del método tradicional de echar suertes en una urna dorada.

El Panchen Lama presidió una oración de media hora de duración para pedir, junto con un centenar de lamas, por la prosperidad y estabilidad de la región y de todo el mundo.

Después de la ceremonia, el Buda viviente impuso las manos sobre las cabezas de los lamas presentes para transmitirles su bendición.

El Panchen Lama llegó a Lhasa el lunes para visitar el templo, como viene siendo tradición desde hace años. Durante su viaje en 2010, visitó Jokhang y otros de los monasterios principales para el Budismo Tibetano.

El Panchen Lama es el vicepresidente de la Asociación Budista de China y miembro del Comité Nacional de la Conferencia Consultiva Política del Pueblo Chino, máximo órgano de asesor político del país.

China mantiene la libertad religosa e invierte grandes sumas cada año para preservar los ritos religiosos y las reliquias culturales.

Las autoridades municipales de Lhasa anunciaron hoy que el presupuesto invertido durante el último lustro en la preservación de reliquias culturales de la ciudad es de 415 millones de yuanes (65,35 millones de dólares).

Más del 90 por ciento de la inversión fue asignada por el gobierno central, según oficiales del buró municipal de protección de reliquias culturales.

Los importantes proyectos incluyen la restauración de monasterios de cientos años de antigüedad como Drepung y Sera y la preservación de sus respectivas reliquias.

El gobierno empezará este año a renovar el maravilloso mural al aire libre de Jokhang, de 4.000 metros cuadrados de extensión, un proyecto de una magnitud sin precedentes, anunciaron los oficiales.