Los diputados del Tíbet ante la Asamblea Popular Nacional (APN) de China, el Parlamento del país, pidieron más servicios de tren en la ruta Qinghai-Tíbet para cubrir la creciente cantidad de visitantes a la meseta.
La escasez de boletos y los pasajeros varados durante las temporadas altas de viaje han creado un "cuello de botella" para el desarrollo del turismo, de acuerdo con una moción entregada a la Quinta Sesión de la XI APN por la delegación de la región autónoma del Tíbet.
Los delegados propusieron que los ferrocarriles que unen a Lhasa con las ciudades de Chengdu, Guangzhou, Chongqing y Lanzhou deben partir diariamente en lugar de cada dos días, como lo hacen ahora.
Actualmente, los trenes circulan diariamente entre Lhasa y Beijing y Lhasa y Shanghai, mientras que entre Lhasa y Xining ofrecen servicio diario sólo durante las temporadas altas en el ferrocarril más elevado del mundo.
De acuerdo con la moción, se deben establecer más oficinas de boletos en otras ciudades tibetanas para garantizar que los turistas tengan acceso fácil a ellos.
La región ha visto un auge en el turismo desde que el tren de 1.956 kilómetros entró en operación en julio de 2006. Más de 8,6 millones de viajes fueron hechos por visitantes nacionales y del extranjero al Tíbet el año pasado.
El Tíbet planea atraer a 15 millones de visitantes al año para 2015, con ingresos turísticos calculados en 15.000 millones de yuanes (2.380 millones de dólares USA) en el periodo 2011-2015. Fin