(SPANISH.CHINA.ORG.CN) - China puso ayer a disposición de la opinión pública una iniciativa de ley destinada a impulsar el desarrollo de la industria cinematográfica del país que ofrece más incentivos a los productores de cine y pretende proporcionar una audiencia más amplia para el cine nacional.

El proyecto de ley sobre promoción del cine, publicado en el sitio de Internet de la Oficina de Asuntos Legislativos del Consejo de Estado, el gabinete de China, reduce el umbral del patrocinio cinematográfico al permitir que empresas e individuos inviertan a través de procedimientos simplificados.

Las empresas estatales y privadas podrán solicitar licencias para hacer cine después de rodar al menos dos películas “que no violen la ley de China”, señala el proyecto de ley.

Las empresas extranjeras podrán participar en la realización de películas a través de la cooperación con sus homólogos chinos.

El Estado incrementará su inversión y ofrecerá incentivos financieros, como reducciones fiscales, en la industria cinematográfica, a la vez que empleará "medidas enérgicas" para combatir las violaciones contra los derechos de autor relacionados con el cine, menciona el proyecto.

Con una producción anual superior a 500 películas, China ocupa el tercer lugar mundial como la mayor industria fílmica después de la India y de Estados Unidos.

Hasta la fecha, el país tiene más de 9.000 salas de cine y en promedio se instalan ocho nuevas a diario, de acuerdo con datos estadísticos de la Administración Estatal de Radio, Cine y Televisión (AERCTV), reguladora de esta industria en el país.

Las películas proyectadas en China el año pasado recaudaron más de 10.000 millones de yuanes (1.570 millones de dólares) en taquilla, lo que representa un aumento de casi 64 por ciento respecto al año 2009, indicó la Aerctv.

El éxito de la industria cinematográfica es muy amplio en las ciudades pero en las vastas áreas rurales del país la expansión de los cines va muy a la zaga.

En un intento por llegar a una mayor audiencia tanto en áreas urbanas como rurales, así como a grupos de mayor edad, el proyecto de ley propone proyectar al menos una película gratuita al mes en cada aldea rural, e incluir al menos dos películas cada semestre durante el período de educación obligatoria estudiantil.

Los gobiernos locales podrían subsidiar los boletos del cine para jóvenes o grupos de bajos ingresos con el fin de satisfacer sus necesidades culturales básicas.

Mayores exigencias sobre contenidos

Al subrayar el crecimiento de la industria cinematográfica, la iniciativa de ley, redactada por la Aerctv, es más estricta respecto al contenido de las películas.

Las tramas de películas que infrinjan los derechos e intereses legales de los menores, o que sean consideradas dañinas para la salud psíquica y física de los menores serán prohibidas de acuerdo con el nuevo proyecto de ley.

Además, prohíbe a los productores promover la obscenidad, las bebidas alcohólicas o los actos criminales en sus películas, y las películas no podrán exagerar las acciones de terror o violencia.