La Revolución de 1911 o de Xinhai –conocida así porque dicho año correspondía al cuarenta y ocho en el ciclo sexagesimal chino – marcó uno de los mayores cambios en la historia de China, poniendo fin a miles de años de régimen imperial y dando inicio al primer gobierno republicano de la historia de China y de Asia.
Iniciada con el Levantamiento de Wuchang, la figura central de este movimiento fue Sun Yat-sen, quien más tarde sería nombrado primer presidente de la nueva República de China.
El país rememora hoy este evento determinante, que inició el camino de su actual desarrollo y modernización.