Liu Jiaqi, un veterano de 98 años de edad del Ejército Rojo, se enfureció cuando observó los procedimientos judiciales sobre un alcalde del centro de China.
El tribunal de Zhengzhou, en la provincia de Henan, sentenció el lunes a Xu Zongheng, ex alcalde de la ciudad de Shenzhen, sur de China, a muerte con un aplzamiento de dos años por aceptar sobornos de más de 33 millones de yuanes (cinco milones de dólares USA).
"La causa de la revolución del Partido Comunista de China (PCCh) jamás fue para el beneficio personal", dijo Liu.
Cuando el PCCh se acerca al 90° aniversario de su fundación, continúa su promesa de eliminar la corrupción.
La dedicación del partido para combatir la corrupción data de octubre de 1927, cuando el presidente Mao Zedong se paró sobre una roca en las Montañas Jinggangshan y anunció las "Tres Disciplinas" del Ejército Rojo: actuar en apego a las órdenes, entregar los artículos confiscados a las autoridades correspondientes y no tomar nada de la gente.
La roca sobre la cual se paró el presidente Mao, conocida como "Roca Rayo" es visitada anualmente por oficiales en entrenamiento de la Academia de Liderazgo Ejecutivo de China en Jinggangshan. Ahí, los futuros oficiales escuchan la historia de las "Tres Disciplinas" para recordarles la oposición de mucho tiempo del partido contra la corrupción.
En el pasado, los miembros del PCCh eran castigados por aceptar regalos y sobornos, recordó Liu.
Los castigos del PCCh eran muy severos entonces por los tiempos económicos difíciles que China atravesaba, de acuerdo con el historiador Ling Buji. Ling dijo que esas acciones mostraban la determinación del partido para erradicar la corrupción y ayudar a lograr el apoyo de la gente.
La campaña contra la corrupción "purificó" al Partido y sentó las bases para los triunfos posteriores del Partido, dijo Ling.
"El Ejército Rojo, dirigido por el comandante Zhu De y por el presidnete Mao, era muy disciplinado. Se ganó la confianza de los agricultores y empresarios que llegaron a Jinggangshan para ganarse la vida, llevar prosperidad y valiosos recursos en tiempos de guerra. Algunos hasta se unieron al ejército", dijo Mao Binghua, curador del Museo de la Revolución de Jingganshan.
En los años 50 del Siglo XX, Liu Qingshan y Zhang Zishan, dos altos oficiales que contribuyeron a la fundación de la República Popular, fueron sentenciados a muerte por corrupción.
"Solamente ejecutándolos podemos salvar a decenas, cientos, miles y decenas de miles de cuadros que habían actuado incorrectamente", dijo entonces el presidente Mao.
"La corrupción es contraria a los principios fundamentales del PCCh, que sostienen que el partido debe servir a la gente con honestidad", dijo Dai Yanjun, subjefe del departamernto de fortalecimiento del partido de la Escuela del Partido del Comité Central del PCCh.
Aunque la corrupción es un problema común en todos los partidos gobernantes del mundo, el PCCh, que gobierna para la gente, debe impulsar sus esfuerzos para eliminar la corrupción. "Ningún castigo es demasiado duro para los actos de corrupción", afirmó Dai.
El 23 de febrero de 2010, el Comité Central del PCCh emitió un código de ética para los cuadros del PCCh con el fin de evitar que la corrupción contamine las filas del Partido.
Las directrices especificaron 52 "prácticas inaceptables" de los líderes y cuadros de varios niveles del PCCh, incluyendo la aceptación de dinero o de otros obsequios y el uso de influencias para beneficiar a las esposas, hijos o "personas cercanas" de los miembros del partido.
Medios de comunicación estatales crearon 52 ilustraciones sobre las prácticas con el fin de ayudar a los funcionarios del gobierno a entenderlas mejor y memorizarlas.
Más de 146.500 funcionarios, 5.098 de ellos de nivel distrital para arriba, fueron sancionados por recibir sobornos en 2010, señalan estadísticas de la Comisión Central de Control Disciplinario (CCCD) del PCCh, el organismo de lucha contra la corrupción.
El número de miembros del partido sancionados representó alrededor de 1,5 por ciento de todos los miembros del PCCh en China, de acuerdo con datos estadístcos. Esto significa que la mayoría de los miembros del PCCh continúan siendo honestos, comentó Gan Yisheng, funcionario de la CCCD.
El 10 de enero, el presidente chino Hu Jintao, también secretario general del Comité Central del PCCh, prometió combatir los sobornos y castigar severamente a los funcionarios corruptos, durante una sesión plenaria de la Comisión Central de Control Disciplinario del PCCh.
Gobernar el país correctamente durante tan largo tiempo es uno de los mayores desafíos que el PCCh ha enfrentado, dijo Yan Shuhan, profesor de la Escuela del Partido.
Si el PCCh quiere tener éxito para enfrentar este reto, necesita el apoyo mayoritario de la gente, expresó Yan. Fin