El primer ministro de China Wen Jiabao declaró esta noche oficialmente clausurada la Expo Universal 2010 en el Centro de Cultura de Expo en Shanghai, luego de seis meses de permanecer abierta.
Se llevó a cabo una ceremonia para celebrar la conclusión de la Expo, que fue calificada por el presidente del Buró Internacional de Exhibiciones (BIE), Jean-Pierre Lafon, como un "asombroso éxito".
La primera expo de su tipo que es organizada en un país en desarrollo, contó con la participación de 246 países y organizaciones internacionales, y recibió 73 millones de visitantes. Ambas cantidades son un récord en la historia de las expos universales, las cuales iniciaron en Londres en 1851.
En una área de 5,28 kilómetros cuadrados, el sitio de la Expo se convirtió en una aldea global donde las personas no solamente podían ver raros tesoros culturales de todo el mundo, por ejemplo las esculturas de bronce de un carruaje y un caballo del período de los Estados Guerreros de China, la estatua de Atenea de Grecia y obras maestras impresionistas de Francia, sino que también pudieron disfrutar el sabor de la diversidad de las culturas del mundo a través de más de 20.000 eventos culturales.
La gala es considerada en China como otro evento representantivo del espendor nacional después de los Juegos Olímpicos del 2008 en Beijing que proyectaron el estatus de China como una potencia económica y política en el mundo. Fin