Un prominente periodista indio rechazó hoy la "propaganda" sobre la independencia del Tíbet, diciendo que el crecimiento económico de la región es positivo y la atmósfera es "relajada".
"Los problemas están en gran medida en la mente de algunos sectores extranjeros, 'un Tíbet simulado', y la propaganda del movimiento proindependentista del Dalai Lama", declaró hoy a Xinhua Narasimhan Ram, jefe editor de Hindu, un importante periódico indio en inglés.
Los comentarios de Ram surgieron luego de concluir una visita de dos días a la Región Autónoma del Tíbet en el suroeste de China a principios de esta semana. Esta fue la tercera visita de Ram al Tíbet desde el año 2000.
Ram describió la forma en que el Dalai Lama y el gobierno tibetano en el exilio trabajan activamente en la India afirmando que los tibetanos fueron convertidos en minoría por el pueblo Han y proclamando un grandioso Tíbet con una población de 6 millones de personas.
Ram ha viajado a varias partes de la región, desde la ciudad capital Lhasa hasta aldeas subdesarrolladas. Ha visto escuelas, monasterios, orfanatos y fábricas.
"La realidad es que el Tíbet está en el camino del desarrollo económico y la atmósfera ahí es relajada, para nada tensa", dijo.
"El Tíbet es remoto para los chinos comunes y es una tontería al decir que los tibetanos son una minoría en Tíbet," explicó.
La población total de la región alcanzó en el 2007 a los 2,84 millones de habitantes, siendo que los tibetanos representaron 92 por ciento, señalan cifras oficiales.
Ram señaló que el problema que enfrenta el Tíbet es la desaceleración económica debido a que la crisis financiera mundial ha inflingido pérdidas en la region.
"Sin embargo, el índice de crecimiento del Tíbet aún es bueno, creciendo alrededor de 10 por ciento al año, mucho más que otras partes del mundo".
Dijo que no hay señales de tensión o represión ahí ya que la gente tiene entusiasmo y la atmósfera es festiva.
"Hay abundantes signos de prosperidad a lo largo del camino que recorrí desde Lhasa hasta Nyingchi", señaló Ram.
Sobre la acción de la región para conmemorar el fin de la servidumbre feudal cada año el 28 de marzo, día en que el gobierno chino disolvió el gobierno aristocrático local del Tíbet y liberó a más de un millón de siervos en 1959, dijo, "es una buena decisión".
"El contraste entre lo viejo y lo nuevo es muy poderoso, demostrando lo que el gobierno chino y el sistema han hecho por el Tíbet".