La vocera del Ministerio de Relaciones Exteriores de China, Jiang Yu, expresó ayer martes su deseo de que el Dalai Lama y sus seguidores puedan "apreciar" la oportunidad de mantener contactos y consultas con el departamento relevante del gobierno central y suspender las actividades separatistas o aquellas que tratan de entorpecer los Juegos Olímpicos de Beijing.
Jiang indicó en una rueda de prensa regular que la política del gobierno central de China hacia el Dalai Lama ha sido siempre coherente, y añadió que el hecho de que el departamento correspondiente vaya a mantener contactos y consultas con el Dalai ha demostrado la amplitud de miras del gobierno central.
"Esperamos que el Dalai Lama y sus seguidores puedan apreciar esta oportunidad, reconocer la situación, modificar su posición, y tomar medidas concretas para detener los crímenes y las actividades violentas, así como las destinadas a entorpecer los Juegos Olímpicos de Beijing y dividir a la patria, para crear las condiciones necesarias para las futuras consultas", señaló.
Jiang dijo que el Tíbet es una parte inalienable del territorio chino, y que tanto el asunto del Tíbet como los contactos y consultas entre el gobierno central y la parte del Dalai, constituyen asuntos internos de China.
"En cuanto a salvaguardar la soberanía nacional y la integridad territorial, el gobierno y el pueblo chinos nunca cederán ante las presiones externas", sostuvo la portavoz, al tiempo que añadió que China cuenta con la confianza y la capacidad necesarias para gestionar sus propios asuntos.
La diplomática expresó su deseo de que la comunidad internacional pueda entender y apoyar plenamente los esfuerzos realizados por el gobierno chino con el objetivo de salvaguardar la soberanía nacional, la estabilidad social y los intereses de todo el pueblo chino.
El departamento correspondiente del gobierno central mantendrá contactos y diálogos con el representante privado del Dalai en los próximos días, según informaron fuentes oficiales a Xinhua el pasado viernes.