El gobierno de la región autónoma de Lhasa, al suroeste de China, reconstruirá la Escuela de Enseñanza Secundaria Número dos de Lhasa, que resultó destruida durante los disturbios del 14 de marzo.
La escuela mencionada fue la más dañada durante los incidentes y el gobierno local invertirá 38,5 millones de yuanes (5,5 millones de dólares USA) para construir un nuevo campus, dijo Song Yiwu, teniente de alcalde de Lhasa.
La vicedirectora de la escuela, Feng Xingjuan, recibió 200.000 yuanes del Grupo Beirun, una compañía china con sede en Beijing, a través del Fondo para Niños y Adolescentes de China ayer domingo.
"Los alborotadores pueden haber quemado nuestra escuela, pero no la voluntad de aprender de nuestros estudiantes ni la atención que nos brinda la sociedad", dijo Feng.
"Nuestra escuela está cerca del monasterio de Ramogia. Los participantes en los disturbios prendieron fuego a los dos edificios de la escuela", afirmó Feng.
Esta situación provocó que 600 estudiantes perdieran sus aulas de estudio, indicó la responsable de la escuela, al tiempo que añadió que no hubo ningún herido durante el incendio provocado.
La escuela reabrió sus puertas el 17 de marzo, pero en la actualidad los estudiantes asisten a clase en laboratorios fríos y otros en el edificio de la escuela primaria.