El doctor tibetano Losang Cering recibió ayer la "Medalla juvenil 4 de mayo del Tíbet", uno de los mayores honores para los jóvenes, por su valor en los disturbios del 14 de marzo en Lhasa.
Losang Cering, cirujano del Hospital Popular del Tíbet, resultó herido al tratar de proteger a un hombre de nacionalidad han y a su hijo.
El 14 de marzo, Losang Cering salió con la enfermera Cejig para rescatar a los heridos cuando vio a Wu Guanglin proteger a su hijo de seis años de edad frente a una casa en llamas y pidiendo ayuda. El niño había sido pisoteado y sofocado por los alborotadores.
En su camino de regreso al hospital, sin embargo, la ambulancia fue interceptada por una docena de personas con cuchillos y palos o con ladrillos que pidieron al han herido.
"Puso su casco de seguridad en mi cabeza y abrazó a mi hijo contra su pecho", dijo Wu a la Televisión Central de China (CCTV).
"Los palos y las piedras cayeron sobre su cabeza y le salió sangre. Me dijo que me cuidara y usó su cuerpo para proteger a mi hijo. Mi hijo no resultó herido, pero él se desmayó" agregó Wu.
La ambulancia se alejó eventualmente de la gente, pero la barbilla de Losang se rompió y sufrió una concusión cerebral.
Según Luo Yigang, doctor de Losang Cering, tiene siete puntadas y su recuperación tomará tres meses.
Mucha gente lo ha visitado luego que escuchó sobre su heroismo.
"Sólo hice mi trabajo como doctor", declaró Losang Cering.
Los disturbios fatales, que dejaron 19 muertos y 623 heridos, tuvieron muchas historias de heroismo.
La comerciante Feng Bixia se lesionó el oído izquierdo cuando salió a proteger a dos niños tibetanos.
Zhu Yifeng, un empleado de una compañía fabricante de celulares de 20 años de edad, dijo estar agradecido con una "rubia alta" que lo salvo de un grupo de alborotadores.