El gobierno chino ha tomado seis medidas en un mes para garantizar la seguridad alimentaria y la calidad de los productos nacionales, informó hoy en Beijing Li Changjiang, director de la Administración General de Supervisión de la Calidad, Inspección y Cuarentena.
El Consejo de Estado celebró una reunión centrada en la calidad de los productos y la seguridad alimentaria, en la cual participó el primer ministro, Wen Jiabao. Se trata del primer encuentro de este tipo en siete años, afirmó Li.
El gabinete chino ha establecido regulaciones sobre la supervisión de la calidad de los productos y la seguridad alimentaria. Además, informó en una circular de que los fabricantes deben responsabilizarse en primer lugar de la calidad de los productos y la seguridad alimentaria.
El Consejo de Estado emitió el 17 de agosto un libro blanco acerca de la seguridad alimentaria en el que China se compromete a prevenir la exportación de alimentos de calidad inferior.
Asimismo, el gabinete ha establecido un grupo encabezado por la viceprimera ministra Wu Yi para hacerse cargo de las cuestiones relacionadas con la calidad y la seguridad de productos.
El gobierno lanzó la semana pasada una campaña, de cuatro meses de duración, para mejorar la calidad de los productos y la seguridad alimentaria. Wu describió la campaña como una "batalla especial" para asegurar la salud y los intereses públicos y la reputación de los productos chinos.
La campaña se centra en los productos agrícolas, los alimentos procesados, el sector del catering, los medicamentos, la carne de cerdo y las mercancías importadas y exportadas que puedan afectar la seguridad y la salud humanas.
Wu subrayó la necesidad de establecer una red de supervisión integral de la calidad en todo el país, que cubra el diseño de productos, las materias primas, el procesamiento, las ventas y los servicios.
Por su parte, Li afirmó que las cuestiones que han afectado a productos chinos recientemente sacados a la luz pública por parte de Estados Unidos se deben a tres factores.
El primer factor es que algunos productos chinos exportados a EEUU tenían problemas de calidad, como la pasta de dientes que contenía glicol dietileno y los juguetes cuya pintura contenía plomo en exceso.
El gobierno chino ha aprobado la retirada de productos solicitada por las compañías estadounidenses e investigará a las firmas china s problemáticas, las cuales serán sancionadas si tienen problemas.
El segundo factor tiene que ver con que los dos países cuentan con diferentes criterios en ciertos productos. Para acabar con este problema ambas partes compartirán sus puntos de vista y tratarán de alcanzar un consenso.
El tercer factor es que algunos productos chinos que cumplían con los criterios de calidad fueron declarados no aptos por las agencias de inspección sin datos fiables. En esta cuestión, China ha discutido con EEUU medidas viables para solucionar este problema.
Desde marzo las cuestiones de seguridad y calidad de los productos "made in China" han estado bajo la luz pública internacional, desde alimentos de mascotas y medicamentos, hasta pasta de dientes, juguetes, productos acuáticos y neumáticos.
(28/08/2007, Agencia de xinhua)
